SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Linde se niega a enviar la documentación que le pide el Parlamento gallego

El Banco de España se cierra en banda a ofrecer la información que le piden. Responde a los grupos parlamentarios de la cámara de Galicia que no les va a enviar la documentación requerida por la comisión que investiga la gestión que ha llevado a la quiebra a las antiguas cajas de ahorros gallegas. Su argumento es el mismo que daba el exgobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, cada vez que acudía al Congreso de los Diputados y le reclamaban datos. No podía hacerlo. Pero alertaba de que estaba entonces y está ahora en sus manos cambiar la ley.

Pues resulta urgente cambiar la ley. No tiene sentido que en la actualidad se niegue el supervisor a entregar documentación porque no respetaría la normativa que le urge a guardar secreto en relación a las informaciones de materia confidencial.

Parece una broma pero es la respuesta del actual gobernador del Banco de España, Luis María Linde. En carta a los grupos parlamentarios les especifica que la información demandada está sujeta al «régimen especial de reserva». El mismo argumento en el que se parapetaba Ordóñez y hemos llegado donde hemos llegado.

En la carta enviada a los grupos parlamentarios gallegos Linde justifica su decisi9ón de acuerdo a la legislación que obliga a los responsables del Banco de España a «guardar secreto en relación a las informaciones de materia confidencial». Pese a la verborrea que suele utilizar cuando les interesa, la masiva es escueta. Que queda claro, que no están dispuestos a colaborar.

Se enteraron a medias del engaño que ellos mismos propiciaron, porque querían que se fortaleciera el capital de las cajas, aunque fuera a costa de haber arruinado a miles de familias, como se ha demostrado que ha sucedido. Pero ahora argumentan que no pueden violentar las leyes.

Pues que actúe el parlamento nacional y resuelva de una vez que se conozca absolutamente todo lo sucedido. Tanta ley de transparencia, para que ahora respondan con que están obligados por la regulación que impide ofrecer la información sometida a materia confidencial.

O sea que se han arruinado cientos de miles de familias, que algunos se han suicidado ante la falta de expectativas, pero no podemos dar los datos que sirvan para clarificar como demonios hemos podido llegar hasta aquí. Siempre habrá algún funcionario de 230.000 euros, o un despacho mejor remunerado todavía que le ponga música a esta letra que tanto desafina. Como dice mi buen amigo el embajador, las comisiones está claro quien se las lleva, pues que se sepa, aunque haya algún organismo oficial que trate de justificarlo, como han denunciado tres magistrados de la Audiencia Nacional

Por lo que respecto a Galicia, La Xunta ya entregó el pasado 6 de junio al Parlamento la documentación solicitada por la comisión de investigación creada en la Cámara para analizar y evaluar la evolución de las antiguas cajas de ahorros.

No está mal la documentación, 34 cajas de documentos que contienen 30.000 folios en relación con la actividad desarrollada por Caixa Galicia y Caixanova, que acabaron fusionadas.

De esa información, 20 cajas de documentación pueden ser consultadas libremente, no es confidencial. Las otras 14 están catalogados como confidenciales.

Ahora debe comenzar el trabajo de la comisión de investigación para analizar la situación de las antiguas cajas de ahorros y de las causas que llevaron a la más que crítica situación actual. Los actuales gestores no dan crédito a lo que ven y viven día a día. No se pueden creer como han sido capaces de concederse indemnizaciones multimillonarias mientras habían arruinado a su clientela con la venta masiva de participaciones preferentes y deuda subordinada.

Han convocado 45 comparecencias, incluidas yen las de exdirectivos de las entidades gallegas, los gestores actuales de Novagalicia Banco y el exgobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Pero a qué esperan para detenerles con el daño que han causado y siguen presumiendo dando clases y conferencias de cómo gestionar la crisis. No queremos más lecciones. Son necesarias decisiones contra quienes han cometido abusos punibles.

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