Cargando...Según Carlos Bravo Fernández, Secretario Confederal de Seguridad Social y Previsión Social Complementaria de Comisiones Obreras, el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocido coloquialmente como la «hucha de las pensiones», estaría sirviendo, además de instrumento de garantía de las pensiones públicas como fondo de ayuda a la financiación del endeudamiento público. Estas son las verdaderas intenciones del Gobierno de Zapatero. Ante el desenfrenado y descontrolado aumento del déficit público, causado principalmente por los planes de rescate de la banca y de las cajas, el gobierno ha echado mano de nuestras pensiones, presentes y futuras.
Se ha conocido esta utilización del Fondo en la reunión del 21 de julio de la Comisión de Seguimiento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, corresondiente al cierre del primer semestre de 2009. Dicho Fondo de Reserva se eleva actualmente a 58.624 millones de euros, es decir, el 5,38 % del PIB. Pero sólo ha aumentado un 2,45% respecto al ejercicio de 2008 y únicamente de los rendimientos obtenidos de la deuda pública que tiene suscritos. El Fondo de Reserva no debe financiar el gasto público. Para garantizar las pensiones futuras debe invertir en los productos financieros más seguros, en deuda soberana de países con el menor riesgo de impago. Y, desde luego, bajo ningún concepto debe servir para comprar deuda pública, que el gobierno está emitiendo, generada para tapar el agujero negro que son los planes de rescate de la banca y de las cajas, además de otras minucias, como la nueva y sangrante financiación autonómica. Porque aumenta su riesgo de impago. Y pone en peligro el futuro de nuestras pensiones.