Cargando...Como respuesta al documento recientemente publicado por el Ministerio de Sanidad «Oferta y necesidades de médicos especialistas» los estudiantes opinan que la falta de médicos no se cura formando más médicos sino redistribuyendo y reorganizando los que ya hay. El conjunto de exigencias del Consejo Español de Estudiantes de Medicina (CEEM) son una mezcla de reivindicaciones justas con toques del corporativismo con el que las élites médicas suelen abordar las necesidades del país y de la población.
Según el informe resentado por el Ministerio, podrían faltar 25.000 médicos en 2025, particularmente de especialidades como Medicina de Familia y Comunitaria, Pediatría, Anestesiología y Reanimación; Cirugía Ortopédica y Traumatología, y radiodiagnóstico.Los estudiante argumentan, en función de la masificación de las facultades (en algunas de las cuales dicen que "el grado de masificación es completamente insostenible. Cada vez somos más alumnos, pero los recursos son los mismos") que el aumento de plazas en las facultades de Medicina no es la solución.En segundo lugar afirman que "ningún indicador nacional o internacional" aconseja la apertura de nuevas facultades. La tasa española de médicos por habitante está, según la CEEM, por encima de la media de los países de la OCDE.En tercer lugar afirman que la decisión de aumentar plazas va contra el criterio de la mayoría de Juntas de Centro y de las recomendaciones de decanos y organizaciones profesionales. Y, en todo caso, si se llevara adelante esta medida, reclaman que debería guiarse por unos niveles de calidad, distribución geográfica y dotación de recursos de todo tipo proporcionales.Asimismo dicen que el aumento de plazas en sí mismo no soluciona la realidad de que muchos médicos se van a trabajar fuera de España, realidad que no concuerda con las "estimaciones" y "dudosos cálculos" sobre médicos españoles que trabajan en el extranjero del informe del Ministerio.Asimismo dicen no entender el "desmedido interés" en aumentar las plazas universitarias cuando en las tres últimas convocatorias MIR han quedado vacantes 250 plazas a pesar de haber 3000 aspirantes más que sitios a cubrir, ni que se intente crear alarma social de forma "injustificada" sobre este problema cuando la carencia de médicos admitida actualmente es menor que la prevista hace tres años. En los últimos años "La falta de incentivos para ocupar uno de estos 250 puestos es mucho más alarmante que el supuesto déficit", aseguran los estudiantes. Por último, reclaman formar parte activa del proceso de creación de nuevas plazas de Medicina como "principales afectados".