Las masivas manifestaciones de los profesionales sanitarios y los ciudadanos afectados por los recortes de la Junta de Andalucía en sanidad consiguieron que se parara la fusión de hospitales en Granada y Huelva
Los médicos de Atención Primaria de Málaga se ponen en huelga este lunes acompañados precisamente por sus compañeros onubenses. En Sevilla, los profesionales agrupados en el Sindicato Médico Andaluz se muestran enfadadísimos tras la última reunión de la Mesa Sectorial de Salud y los sanitarios de Granada y Cádiz amenazan con unirse a la protesta de Málaga y Huelva. La sanidad en Málaga es la última en listas de espera para operaciones, tiene menos camas por habitantes y las peores urgencias de España por saturación. La provincia viene reclamando por un tercer hospital en la capital desde hace diez años, tiene uno sin terminar desde bastante tiempo en Marbella y uno en uso e inaugurado al que todavía no ha llegado la acometida de la luz en Cártama.
La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO ha elaborado un informe en donde alerta de la insuficiente financiación que padece la sanidad andaluza. Fruto de los continuos recortes que ha sufrido desde la crisis y que está todavía muy lejos de resarcirse.
En el informe, se señala que en este año, el presupuesto en Sanidad andaluz ha aumentado en un 5’45% con respecto al año pasado, lo que equivale a unos 500 millones de euros más. Sin embargo, pasa inmediatamente a afirmar que ese incremento es claramente insuficiente para revertir los efectos producidos por los recortes en Sanidad de la última década.
Según el informe, Andalucía es, después de Cataluña, la comunidad autónoma que más ha recortado en sanidad desde 2010, un total de 6.648 millones de euros acumulados como suma de todos los recortes. Es la tercera comunidad autónoma que más ha recortado en gasto de personal sanitario, 1.000 millones de euros menos.
Andalucía es la comunidad autónoma que menos invierte en sanidad per cápita, 1.115 euros por habitante. Las consecuencias de esta situación son aumento excesivo las listas de espera, saturación de servicios o déficit de plantillas y la percepción de descontento de la población andaluza en las encuestas del barómetro sanitario.
Por ejemplo, Andalucía, Extremadura y Madrid resultan ser las tres comunidades autónomas que más han incrementado el porcentaje de pacientes que con más de seis meses en listas de espera quirúrgica. En Andalucía ha subido de 76 días en 2016 a 78 días en 2017 el tiempo medio de espera quirúrgica, según CCOO. Y es la comunidad autónoma con menos camas de hospital por habitante (2’62 para cada mil).
Actualmente hay 965 trabajadores sanitarios menos que hace seis años. Lo que la convierte en la tercera comunidad autónoma con mayor déficit de plantilla desde 2012.
Los andaluces lo notan en sus carnes y lo denuncian. En cuanto a percepción de la calidad de servicio por parte de la población, Andalucía es la segunda comunidad autónoma con la peor puntuación en sistema sanitario, sólo por debajo de Canarias. Y es, después de Asturias, la comunidad autónoma con el mayor porcentaje de gente que considera que la calidad de atención sanitaria ha empeorado.
La Marea Blanca lleva años enfrentándose a la continua degradación que está sometiendo a la sanidad pública andaluza por parte de la Junta de Andalucía a través de sus recortes. Ya en octubre de 2016, 50.000 personas se manifestaron por la fusión de dos hospitales en Granada. Movilización que a los pocos meses volvió a sacar a la calle a más de 70.000 personas en Huelva y Málaga contra la situación en sanidad.
Y que se volvieron a manifestar en junio de este año, con más de 60.000 personas por el centro de Sevilla con la consigna “una sanidad pública sin recortes”, uniendo no solo a profesionales y personal sanitarios, sino pacientes y a la población andaluza, que ve como está en juego su salud.
Andalucía no se merece esta situación. Los recortes deben revertirse cuanto antes, no valen meros parches. Por una sanidad de verdad al servicio del pueblo.