La realidad era peor de lo que temíamos

El verdadero rostro antidemocrático de quienes pretenden imponer el 1-O al conjunto de la sociedad catalana ha salido a la luz.

Sabíamos que estaban dispuestos a violar todos los derechos y garantías democráticas para quebrar la voluntad de la mayoría sociedad catalana e imponer la celebración del 1-O.

Pero lo vivido en el parlament catalán supera todos los límites imaginables.

Para aprobar en unas pocas horas la ley de referéndum, Junts pel Sí y las CUP han recurrido a la trama legal de proponer a última hora una alteración del orden del día de la sesión parlamentaria, que apenas ofrecía un plazo de dos horas a la oposición para presentar enmiendas.«Pero lo vivido en el parlament catalán supera todos los límites imaginables»

Pero además, han propuesto y aprobado unilateralmente un procedimiento extraordinario que “evite trámites parlamentarios”, eufemismo para ocultar la supresión de derechos básicos de los diputados de la oposición, como el debate de enmiendas a la totalidad o la posibilidad de pedir un dictamen al Consell de Garanties Estatutaries, el órgano que vela por el respeto de los derechos reconocidos en el estatut.

Utilizando a la presidenta del parlament -Carme Fordacell, cabeza de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), fuerza de choque del procés- como ariete del govern de Puigdemont contra la oposición.

Ante la negativa del secretario general del parlament a referendar la publicación de la ley de referéndum en el Diari Oficial de la Generalitat, requisito para que pueda debatirse, la presidenta del parlament y los cuatro miembros de Junts pel Si en la Mesa han usurpado su papel, publicándola por su cuenta.

Incluso los requisitos necesarios para el proceso exprés de la “lectura única” han sido violados. Es necesario que los documentos a debatir estén publicados y a disposición de los parlamentarios 48 horas antes… y se han publicado escasos minutos antes de iniciarse la sesión.

En un intento esperpéntico por dejar “atada y bien atada” a la oposición, la presidenta del parlamente incluso se negaba a suspender la sesión del parlament para permitir a los grupos discrepantes preparar las enmiendas.

No el Tribunal Constitucional “español” sino el letrado mayor del parlament catalán ha hecho público un informe donde denuncia que la aplicación de la modificación del orden del día “conculcaría los procedimientos y requisitos parlamentarios inexcusables para cualquier ley”.

Pues bien, la presidenta del parlament se ha negado siquiera a leer ese informe, a pesar de que muchos diputados lo reclamaban.

El escándalo antidemocrático perpetrado hoy en el parlament catalán no tiene precedentes, y ha provocado unánime indignación de toda la oposición.«El verdadero rostro antidemocrático de quienes utilizan “el derecho a votar” como coartada ha salido a la luz»

Por parte de Ciudadanos, Carlos Carrizosa ha denunciado que “intentan atropellar los derechos de los grupos parlamentarios y de los catalanes que han votado a partidos con diferentes sensibilidades”.

El secretario general del PSC, Miquel Iceta, ha dejado claro que “los derechos de los diputados no pueden ser pisoteados de cualquier manera”.

Especialmente duro ha sido el portavoz de Catalunya Si Que es Pot, Joan Coscubiela, afirmando que “situando las instituciones catalanas en un estado de excepción. La mayoría de la cámara quiere hacer saltar por los aires todas las garantías de la tramitación parlamentaria y de los derechos de los diputados. Los derechos de los diputados no pueden ser derogados. Esto no es democracia”.

Dirigiéndose a Junts pel Si y Puigdemont para preguntarse si “saltarse las leyes y los derechos de los diputados es la base del país que se pretende construir”.

El verdadero rostro antidemocrático de quienes utilizan “el derecho a votar” como coartada ha salido a la luz. Es peor y más negro de lo que temíamos.