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Asistimos a toda una operación de propaganda basada en difundir dos falsedades. La primera, que el PP ha obtenido una rotunda victoria el 26-J. La segunda, que los votos han decidido que Rajoy forme gobierno, y que esta es la única salida para escapar del bloqueo político.
Curiosamente, o no, quienes mejor han valorado el sentido político de los resultados del 26-J han sido los grandes medios norteamericanos.
The Wall Street Journal afirma que “con esta victoria agridulce, el PP atraviesa las mismas dificultades para formar gobierno”. Mientras The New York Times dice en su editorial que “la repetición de las elecciones no es capaz de aclarar el futuro político de España”.
Ellos saben que, al margen de la propaganda, el PP ha salido debilitado de la doble vuelta electoral compuesta por el 20-D y el 26-J. Y que se ha manifestado un rechazo mayoritario a su política de recortes que dificulta su acceso al gobierno.
A pesar de ser el partido más votado, los 690.000 votos recuperados por el PP respecto al 20-D no pueden ocultar que en realidad ha perdido 2,9 millones de votos respecto a las generales de 2011, y 2,3 millones si cogemos como referencia 2008.
El PP es el partido que más votos ha perdido desde 2011, duplicando los que se ha dejado el PSOE. Representa menos de un tercio de los votos y solo un 22,5% del censo. Los 137 diputados conquistados suponen un mínimo histórico, nunca un gobierno ha sido investido con una base electoral tan débil.
Esta es la realidad, y podía haber sido peor si una ley electoral injusta no les protegiera del rechazo popular. Con una distribución equitativa de escaños, el PP tendría solo 119 diputados, 18 menos que ahora, y tendría casi imposible formar gobierno.
Quienes nos presentan que un nuevo gobierno del PP es lo que se corresponde con lo que han dicho los votos no presenta un solo número… Porque estos dicen exactamente lo contrario. Que 16,2 millones, el 63,1% se han negado a votar al PP.
Quien está en minoría es Rajoy, que todavía no ha conseguido un solo aliado para formar gobierno.