Cargando...
Ya no es un secreto a voces, sino un secreto a gritos. Se hacen eco todos los medios internacionales, y en España la agencia EFE, Europa Press o RTVE. Ya lo difundió en diciembre el New York Times, y ahora lo reconoce la propia emisora pública israelí Kan.
La inteligencia israelí conocía «con alto grado de precisión» y con antelación al 7 de octubre los planes terroristas de Hamás para secuestrar y asesinar. El Estado de Israel estaba plenamente prevenido del 7-O… y no hizo nada por evitarlo, dejando a Hamás perpetrar sus crímenes y desencadenando una ofensiva genocida en Gaza que dura ya nueve meses.
La cadena de televisión pública israelí Kan emitió un informe de inteligencia publicado el 19 de septiembre de 2023, tres semanas antes de los ataques del 7 de octubre, en el que murieron unas 1.200 personas y fueron secuestradas otras 251.
La investigación de la inteligencia militar (Shin Bet) informa sobre los entrenamientos de los milicianos para infiltrarse en bases del Ejército, aunque preveía un número menor a los 3.000 miembros de Hamás que finalmente lanzaron la incursión. El texto da detalles sobre los planes de los terroristas para secuestrar «entre 200 y 250 personas», incluyendo los entrenamientos llevados a cabo por unidades de élite de Hamás que incluían prácticas sobre ataques contra posiciones militares y kibutz en territorio israelí.
Paralelamente a estas revelaciones, el Tribunal Supremo de Israel ha ordenado suspender temporalmente la investigación sobre los fallos del Ejército y del Shin Bet, la agencia de inteligencia interna, que permitieron la incursión de Hamás, al considerar que «es contraproducente hacerlo mientras está en curso la guerra».
Estas nuevas noticias sobre este «secreto a gritos» llega en un momento donde aumenta la presión sobre Netanyahu. En las calles, las protestas contra la guerra y por la dimisión del primer ministro frente a su residencia, que se repiten cada sábado en Tel Aviv, suben de intensidad y congregan a cada vez más miles de personas.
Y Netanyahu afronta una crisis interna. El líder opositor Benny Gantz, que formaba parte de su gobierno, ha salido del ejecutivo buscando forzar un adelanto electoral, y el primer ministro ha disuelto el gabinete de guerra.