Muchos de los países más pobres del mundo se están haciendo cada vez más dependientes en ayudas al desarrollo, a medida que sus exportaciones e ingresos fiscales se reducen por causa de la crisis.
El Banco Mundial subrayó que sólo una cuarta arte de los países en desarrollo vulnerables están capacitados para tomar medidas financieras con el fin de suavizar las repercusiones de la recesión económica, como creación de empleo o activación de programas de seguridad.El informe del Banco Mundial también afirma que 94 de 116 países en desarrollo han experimentado una ralentización en su crecimiento económico. De esos países, 43 tienen altos índices de pobreza.Hasta la fecha, los sectores más afectados son aquéllos que se mostraban más dinámicos: exportación de base urbana, construcción, minería y manufactura. Camboya, por ejemplo, ha perdido 30.000 puestos de trabajo en la industria textil, la única con cierto peso en la exportación.Más de medio millón de empleos se han perdido en los últimos tres meses de 2008 en la India, incluidos los sectores de joyería, automoción y textil, según el informe.Muchos de los países más pobres del mundo se están haciendo cada vez más dependientes en ayudas al desarrollo, a medida que sus exportaciones e ingresos fiscales se reducen por causa de la crisis. Los donantes llevan ya un retraso de unos 39.000 millones de dólares respecto a sus compromisos al incremento de ayuda realizados en la Cumbre de Gleneagles de 2005.Ahora el problema es que el flujo de ayudas se va a hacer cada vez más volátil, a medida que ciertos países recortan su presupuesto en ayudas mientras otros reafirman sus compromisos, al menos por este año.Es evidente que hay que inyectar recursos fiscales a los países ricos que se encuentran en el epicentro de la crisis, pero quizás resulte todavía más rentable canalizar las inversiones en infraestructura hacia el mundo en vías de desarrollo, donde pueden estimular el crecimiento y restaurar rápidamente la demanda, lo cual debería constituir un elemento clave en la recuperación económica»Algunos países emergentes y en vías de desarrollo pidieron prestadas grandes cantidades de préstamos antes del estallido de la actual crisis financiera. Es posible que la retirada de fondos foráneos desde estos países impida el desarrollo de su economía. De acuerdo con las estadísticas del Banco de Liquidación Internacional entre el periodo comprendido entre 2002 y el marzo de 2008, las economías emergentes pidieron prestados unos 2.750.000 millones de dólares, cifra tres veces la registrada anteriormenteEl Banco Mundial afirmó el domingo que la economía global se contraerá en 2009 por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, y estimó que los países en desarrollo tendrán que hacer frente este año a un déficit financiero de 270-700.000 millones de dólares.En un informe para la reunión de los ministros de finanzas y gobernadores de los bancos centrales del Grupo de los 20, el Banco Mundial dijo que la aguda contracción global está afectando tanto a los países avanzados como a aquéllos en vías de desarrollo. «El PIB global caerá este año por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, con un crecimiento al menos 5 puntos porcentuales inferior al potencial», asegura el informe.