Cargando...Al mas puro estilo Pablo Escobar, (intimo amigo de Vladimiro Montesinos y según diversas fuentes, uno de los principales financiadores de las campañas electorales de Fujimori), el cual fue recluido en una cárcel dorada , en Colombia donde tenía mas que una cárcel un hotel de vacaciones. El expresidentes peruano y genocida condenado. Gracias a la alianza que su fuerza política ha consensuado con el partido del Presidente Alan García Pérez, también genocida pero no condenado. Vive en un retiro dorado, organizando la campaña de su hija Keiko para las elecciones presidenciales del 2011, unica esperanza que le queda de salir indultado.
Las visitas que el reo Alberto Fujimori ha venido recibiendo ilegalmente, ocurrieron desde mucho antes de que se le sentenciara, fueron denunciadas hace meses y han uesto en evidencia la alianza que existe desde hace mucho tiempo entre el gobierno de Alan García y la mafia fujimorista. El ex dictador goza de un sistema de privilegios que le permite recibir, a cualquier hora del día. Tiene en su celda un cuartel político donde recibe hasta 100 visitas por día de ex ministros, ex militares y legisladores en activo. "En su celda Fujimori organiza reuniones políticas con toda libertad. El ex gobernante goza de increíbles privilegios en la prisión de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía, ubicado al este de Lima", indicó la publicación. Las personas ingresan a cualquier hora del día y sólo algunos son registrados en los libros de visitas que manejan los agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), encargados de la custodia de Fujimori, reseñó la fuente. La República puso como ejemplo el caso del coronel en retiro Gerardo Rejas Tataje, quien entró de visita al penal a las 10:20 de la mañana y salió a las 15:00 horas, el pasado 24 de mayo. Rejas, un ex comando que se hizo conocido durante la operación que permitió rescatar a los rehenes del MRTA en la residencia del embajador japonés en Lima, en 1997, es señalado por el diario como el líder de los arapintadas", un grupo de seguidores de Fujimori que realizan manifestaciones violentas. Grupo que generó actos de violencia contra un grupo de abogados y familiares de las víctimas de las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, durante el primer día del juicio a Fujimori, en 2007. Sin embargo, en el registro del INPE no aparece consignada la visita del hombre que organiza las movilizaciones de los fujimoristas, subrayó. El diario afirma que “fuentes policiales y del INPE que laboran en el penal de Barbadillo confirmaron que Alberto Fujimori tiene todas las comodidades y facilidades para realizar sus reuniones con los delegados del partido Fuerza 2011 que vienen de las diferentes bases a nivel nacional y Lima Metropolitana, con el objetivo de recibir instrucciones para apoyar a su hija Keiko Fujimori”. El presidente del INPE, Jorge León Ballén, explicó a La República que "no tenía conocimiento de los hechos", y justificó que Fujimori usara el establecimiento donde está preso para organizar reuniones partidarias. "A Fujimori sólo se le ha privado de su libertad, mas no de otros derechos que tiene como cualquier ciudadano", argumentó el presidente del INPE. El Reglamento del Código de Ejecución Penal señala que todo interno tiene derecho a formar agrupaciones culturales, deportivas, laborales, artísticas y religiosas, pero no está permitido realizar actividades políticas dentro de un centro penitenciario.Señaló que el ex mandatario sólo se desplaza en el área permitida por el INPE, y que "inclusive Fujimori ha cultivado un jardín". Entre los asistetes más asiduos se encuentran los congresistas fujimoristas Luisa María Cuculiza, Martha Moyano, Cecilia Chacón D’Vettori, y Alejandro Aguinaga Recuenco. El pasado martes, en un día de visita, Alberto Fujimori llegó a recibir a más de 100 personas, entre hombres y mujeres, la mayoría delegados del partido Fuerza 2011 reseñó el cotidiano. El ex presidente y condenado por genocida, que también recibe clases de pintura y canto, es custodiado por cuatro efectivos del INPE y tiene a su disposición dos médicos y una enfermera atentos a su estado de salud.