Cargando...No es lo mismo ir de verde que ser verde el ayuntamiento de Barcelona. Los primeros son los trabajadores de Parques y Jardines. Los segundos son los que se han instalado en los cargos de dirección de la misma entidad. El dos de abril se concentraron decenas de trabajadores ante la sede de Iniciativa per Catalunya-Verds, y después de media hora larga de cacerolada, colgaron de los balcones de la sede100 rollos de papel higiénico, en denuncia de los contratos a dedo, privatización de zonas verdes e incumplimientos de convenio. «Mierda» que, según los convocantes, es necesario limpiar.
Dos días antes, la dirección de Parques y Jardines había desalojado los locales del Comité de Emresa de Mantenimiento en Canyelles, sin tan siquiera avisar de la fecha del desalojo ni proporcionar locales aptos en otra ubicación. Los sindicalistas se encontraron de repente con los locales destinados al Comité de Empresa, de los que tienen cesión de uso, tapiados y sin posibilidad de acceder a documentación, ordenadores o teléfonos, en lo que consideran una vulneración del derecho a la libertad sindical. Hay una denuncia puesta en la comisaría de la policía autonómica puesto que se había manipulado, para su traslado “de cualquier manera” a otro local, todo tipo de documentación confidencial propiedad del comité y de cada uno de sus miembros. Resulta que el comité denuncia que en Parques y Jardines se vienen haciendo contrataciones fraudulentas, especialmente en categorías de alto nivel, de las cuales el Comité de empresa no ha recibido información ninguna sobre el sistema de selección empleado, por lo que se sospecha haya un sistema clientelar basado en el “enchufismo”. El matrimonio Saura-Mayol están protagonizando, uno en el caso de la represión de las movilizaciones contra el Plan Bolonia, la otra en la represión del movimiento sindical en Parques y Jardines, episodios que evocan la actuación de las autoridades en otros tiempos. Ni los Mossos de Esquadra reprimen el movimiento estudiantil sin órdenes políticas del Conseller, ni en Parques y Jardines se agrede al Comité de empresa sin consentimiento de la Presidenta. Paradójicamente, ambos son exponentes de la supuesta izquierda radical catalana (apoyo al movimiento ocupa, ecosocialistas, catalanistas) que subió al poder gracias al Pacto del Tinell, de exclusión del PP. Todo parece indicar que las respuestas a la crisis de este sector no varían mucho de las que nos van a aplicar sus supuestos antagonistas.