Cargando...El sector del aceite está en guerra contra los monopolios de distribuición. Del resultado de esta batalla depende la supervivencia de un cultivo, que solo en Andalucía, tiene 350.000 explotaciones.
Ayer, sábado 14 de marzo, más de mil tractores cortaron uno de los accesos a Jaén. Estaban convocados or la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), y fue un éxito. La concentración fue desde11:00h de la mañana hasta las 13:30h. Los olivareros se plantaron frente al centro comercial de "la Loma", centro donde se encuentra la superficie francesa Carrefour. El objetivo principal de los pequeños agricultores del olivar es marcar una ley que arbitré los margenes comerciales. Esta ley busca acabar con la política agresiva de las plataformas comerciales de distribuición. Actualmente en muchos supermercados se puede comprar aceite a 2 euros el kilo. El problema está en que producirlo nunca cuesta menos de 2,30 euros kilo. Es una situación donde, las gigantescas superficies comerciales, controlan el 90 % de la venta. Para otro tipo de mercado, como las cooperativas, solo queda el 10 % del negocio. En concreto UPA plantea que los supermercados practicamente se basan en la marca blanca; según la organización agraria más del 50 % del aceite va a parar a este destino. Aquí radica el problema. Ellos compran más de la mitad del aceite español y por eso pueden marcar el precio que les convenga. Incluso más barato de lo que cuesta. Frente a esto el Gobierno cierra los ojos y aplica la tolerancia con unas superficies comerciales que ponen en cuestión 350.000 explotaciones. Los datos son contundentes. Más de 650 millones de euros de perdidas. Más de la mitad de las explotaciones andaluzas, unas 175.000, no pueden cubrir gastos. Por este mismo motivo, en Córdoba, este proximo miercoles 18, habrá una marcha con tractores. Desde UPA Córdoba se denuncia también los altisimos costes de la recogida, y se confirma que el precio de compra al productor es más bajo que hace 30 años. Es vergonzosamente gráfico ver como los monopolios, como carrefour o día, asfixian a un sector tan importante para España y para tantos trabajadores. Está en juego la supervivencia del aceite de oliva, sector en el que España siempre ha sido el primer productor mundial.