Cargando...Ya hay cuatro huelguistas en la puerta de la Moncloa. El Gobierno tiene que responder porque estos últimos huelguistas solo reivindican derechos fundamentales recogidos por la constitución.
La semana asada conocimos el caso de Santiago Cortés, un granadino encofrador en paro a punto de desahucio. Frente a la impotencia del embargo de su casa donde vive con sus cuatro hijas no o dudo, huelga de hambre para presionar una renegociación de la hipoteca.Frente a la falte de un sindicalismo mayoritario que sea combativo en los derechos de los trabajadores, estos recurren a formas desesperadas de lucha.Esta tarde dos trabajadores de Elche comenzaran una huelga de hambre frente al Palacio de la Moncloa. La exigencia es ser recibidos por el Presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.Los dos trabajadores, Segundo Quiñones y José Alcores, quieren que Zapatero les explique qué ha hecho con sus puestos de trabajo y dónde están las famosas ayudas a los desempleados.Desde el pasado mes de Febrero una iniciativa parecida esta en marcha por otros dos desempleados; Antonio y José están acampados desde hace dos meses esperando a ser recibidos por el presidente con similares cuestiones.Los ilicitanos denuncian que los sindicatos no tienen tiempo para estas reivindicaciones reales debido a las organizaciones de inofensivos uno de mayo.“Queremos que nos reciba y nos dé explicaciones. Hemos perdido la casa, no tenemos con qué alimentar a nuestros hijos y exigimos un trabajo digno porque queremos llevar una vida digna”. Estas declaraciones a HO de los nuevos huelguistas de hambre definen con meridiana claridad cual es la situación de millones de trabajadores en España.Han recorrido 450 km en tres semanas, ningún sindicato ni partido les ha prestado atención pero ellos llegaran hasta las últimas consecuencias para ser recibidos por Zapatero y recibir las pertinentes explicaciones.La situación roza lo absurdo humillante en España. Un partido que se declara del socialismo en España gana las elecciones frete a la arcaica derecha, la que nos mete en la guerra y recorta libertades y derechos.Pero la realidad es que mientras este Gobierno da 259.000 millones de euros a la gran banca y estrangula todos los sectores productivos hay huelgas de hambre por los derechos más básicos de nuestra sociedad.Cuidado, cuando estos pequeñitos destellos comienzan a sucederse, no se sabe que puede ocurrir.