Televisión

Hermanos mayores y abuelos rockeros

El fenómeno de la telrrealidad sufre en los últimos tiempos una gratificante mutación. El morbo y la competitividad ceden paso a la didáctica o la «realidad» de utilidad social. Es el caso de las dos propuestas que estrenaron ayer Cuatro y la autonómica TV3. En la primera «Hermano mayor», el medallista olí­mpico de waterpolo, Pedro Garcí­a, que atravesó serios problemas con las drogas, intentará ayudar a familias y jóvenes con problemas similares. En el segundo, «Casal Rock», las cámaras seguirán durante ocho semanas la evolución de un coro de jubilados, dirigido por Marc Parrot, que se lanzarán a interpretar temas de AC/DC o Nirvana.

Cameón del Mundo y medallista olímpico en Atlanta 96, Pedro García es un deportista de élite reconvertido en terapeuta. Pero su vida ha estado marcada por dos cosas: el waterpolo, su pasión, y sus adicciones, su gran problema. Tras 14 años de adicción a la cocaína y 5 de tratamiento en rehabilitación, Pedro empezó a ayudar a jóvenes que se veían inmersos en este duro mundo. Desde ayer es además el encargado de presentar Hermano mayor. El nuevo programa muestra con toda su crudeza hogares donde la vida cotidiana se ha convertido en una lucha constante entre padres desorientados e hijos que han impuesto su ley y su tiranía. Con este espacio, la cadena de Sogecable persiste en su apuesta por los denominados programas de “teaching”, avanzando en el camino iniciado por “Supernanny” y “S.O.S. Adolescentes”. “Hermano mayor”, endurece su registro, tratando de llegar a situaciones mucho más difíciles que en sus predecesores, en un formato desde el que se pretende tanto ayudar a la familia protagonista del capítulo, como orientar a los que lo siguen desde sus casas. Con un tono mucho más desenfadado, pero más original y atrevido si cabe, presentó TV3 la nueva creación de la productora El Terrat: Una docu-serie de 8 episodios en la que 25 personas mayores de 70 años, seleccionadas durante un recorrido por corales y residencias de Cataluña, ensayan para dar un concierto de rock. La dirección del coro corre a cargo del músico y productor Marc Parrot, que les prepara para culminar su trabajo con un concierto abierto al público. El repertorio, como el ritmo de los ensayos, exigente y cañero: "Aún recuerdo cómo se tapaban las orejas la primera vez que puse Highway to Hell,de AC/DC", comentaba Parrot. Ahora, Vicenç Calahorra (73 años) e Isabel Cano (75) bordan el irreverente tema de rock duro. Una sorprendente propuesta, fundamentada en el entretenimiento, pero que utiliza esta telerrealidad para acercar generaciones y romper barreras.

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