Tras la ruptura de las negociaciones entre patronal y sindicatos

Hace falta ya una Huelga General contra la crisis

La ruptura de las negociaciones entre los sindicatos, UGT y CCOO, y la patronal para renovar este año el Acuerdo de Negociación Colectiva (ANC), por falta de acuerdo salarial (la patronal CEOE pide subida salarial 0), ha desencadenado una reacción en cadena de todos los medios. Advierten de «los peligros de una escalada sin control de la conflictividad laboral» ante la perspectiva de la negociación de los convenios colectivos. ¿Pero es ese realmente el problema?

Por mucha conflictividad que haya en la negociación de los convenios, como ocurre con los ERE, uno a uno, sector or sector, provincia por provincia…, ese es el marco en el que la patronal y el gobierno buscan meter al movimiento obrero y a los sindicatos.El problema es que no se puede desligar la negociación de los convenios del marco general, del paro desbocado camino de los 5 millones, del millón y pico de parados que ya no cobran ninguna prestación, de las decenas de miles de trabajadores afectados por los ERE, de los cientos de miles de PYMES, autónomos y familias asfixiadas por la banca… Un marco general de crisis marcado también por las medidas que está tomando el gobierno y la posición adoptada por la oligarquía financiera y la gran patronal.Es decir, el problema es que no hay soluciones parciales y, por lo tanto, está ya desbordado el marco de las luchas parciales y aisladas.En un marco general de crisis que recorre de arriba abajo toda la sociedad, todos los sectores, todas las situaciones y, especialmente, las que afectan al conjunto del pueblo trabajador, la necesidad de una respuesta general encabezada por el movimiento obrero y sindical es cada vez más urgente. Con un objetivo central: cambiar el rumbo de la política frente a la crisis que está siguiendo el gobierno de Zapatero, con el respaldo de la banca y la gran patronal.Un gobierno que ha decidido poner la mayor parte de los recursos públicos al servicio del rescate de la banca, y que para “combatir el paro” fomenta el empleo precario a tiempo parcial o paga de la caja del paro subvenciones a los empresarios que contraten parados que cobran, excluyendo a más de un millón que ni siquiera cobra un euro de prestaciones.Y una banca, multinacionales y gran patronal que utilizan lo más duro de la crisis, el horizonte de los 5 millones de parados, como chantaje al conjunto de la sociedad y los trabajadores esperando que cedamos ante una salida a la crisis favorable a sus intereses.Quienes ahora levantan la bandera de “la paz social” en beneficio del “interés general”, ¿por qué no levantaron la bandera del reparto de la riqueza cuando banca y gran capital se enriquecían con beneficios del 73%? ¿Por qué no exigen ahora una redistribución de las rentas y de los impuestos para que paguen más los que más han acumulado o más beneficios obtienen o, por ejemplo, nadie (salarios, pensiones, parados) gane menos de 1.000 euros pero nadie más de 10.000?Y quienes desde el movimiento sindical, como Cándido Méndez (UGT) o Fernández Toxo (CCOO), dicen que no se planteará una huelga general “mientras no haya un escenario de agresión contra los derechos de los trabajadores”, ¿acaso consideran pocas agresiones a los derechos de los trabajadores el paro desbocado, los 1,4 millones que no cobran ningún subsidio, las medidas para pagar de la caja del paro los contratos, el nuevo salto en la precarización del empleo con la contratación a tiempo parcial, la entrega de los recursos públicos a la banca mientras se hunden empresas y familias…? ¿A qué esperan también, a llegar a los 5 millones de parados y dos millones sin cobertura para movilizarse?Hay un runrún en el movimiento obrero y sindical intermedio y de base, y en el conjunto de la sociedad que ve cada vez más necesario un cambio de rumbo para salir de la crisis y barrunta -como ocurrió con las Huelgas Generales a los gobiernos de Felipe González (la HG del 14-D) y Aznar (la HG del 20-J contra el decretazo)- que es necesaria ya un Huelga General contra la crisis.

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