Cargando...En 1928, Albert Londres publicó una obra que sería clave en la literatura francesa y europea del siglo XX. La historia de Dieudonné, un condenado a muerte a quien se le había conmutado la pena de asesinato por falta de pruebas (resultó ser inocente) y se le había enviado a cumplir confinamiento en el trópico. La novela provocó un movimiento generalizado en Francia, de rechazo a la existencia de cárceles coloniales. Ahora su adaptación al cómic se edita en España, después de haber acaparado una gran admiración en los festivales del último año
La vida de este militante anarquista contada or Albert Londres impactó tanto en la sociedad francesa que la opinión pública obligó al gobierno a cerrar las cárceles de las colonias. El aspecto sórdido de los presos, de rostros marcados y tatuajes de fortuna, sumerge al lector en la miseria del patíbulo, entre las enfermedades, el hambre, el asfixiante paisaje de jungla tropical y la angustia de la lucha diaria por la supervivencia.En su versión gráfica, Maffre utiliza el blanco y negro de forma contundente, con la crudeza de su dibujo desnudo refleja la desesperanza de la vida en estas cárceles. La expresividad del ágil trazo confiere a la obra una tercera dimensión, y ahonda, con la rotundidad que adquieren las imágenes, en la denuncia de las situaciones que Londres encontró en sus viajes.Para retratar la situación real en la colonia, el autor de "Fugitivo" ilustra al lector con frases de la época que trasladan el miedo al territorio americano y la deshumanización hacia los que allí vivían. "Si no sois buenos acabaréis en la Guayana", decían los maestros de escuela a los niños; pequeñas escenas que muestran la doble moral que practicaba la sociedad francesa.Con esta edición en formato de novela gráfica de 128 páginas, Laurent Maffre -deudor de las historias de guerra de Jacques Tardi y de la adaptación cinematográfica de "Papillon"- devuelve a la actualidad la crítica al colonialismo francés. Con el cierre de Guantánamo como reivindicación mundial, un autor de cómic francés saca del baúl el testimonio de los horrores que cometía su propio país, hace apenas 70 años.