Filgueira coidado! (¡Cuidado con Filgueira!)

Rodolfo Llois, dirigente socialista y director general de Primera Enseñanza entre 1931 y 1933, escribía en su obra “La revolución en la escuela” acerca de la actitud de los miles de nuevos maestros que en el proceso de reforma se incorporaban a las escuelas rurales: “Con una sinceridad que hubiésemos querido ver en los demás sectores del país, confesaban que si no hacían más ni mejor era porque no les daban medios, porque no les habían enseñado otra cosa. Sabían que se podía hacer más y querían aprender” Algo así es lo que podríamos pensar del profesorado del colegio San Xoán de Filgueira de Ferrol. La comunidad educativa de este centro ha despedido el año con una victoria, aunque sea pequeña y momentánea: el retroceso de los recortes planteados para el año que viene en la plantilla. La respuesta del colegio ha sido de absoluta unidad, de profesores, padres y madres, y alumnos. Sabemos que en otras circunstancias el gobierno, central o autonómico, es capaz de mantener éste y otros pulsos, pero probablemente la contundente y unitaria respuesta no se esperaba. No parece que la Xunta pudiera permitirse a un grupo de menores con sus padres y profesores encerrados todo el verano en las aulas del colegio, con lo que eso significa. Más teniendo en cuenta que el 15-M ha asentado un antes y un después en este tipo de respuestas de indignación, determinación, resistencia y capacidad de rápida extensión. Hace unos días le preguntaban a un destacado profesional de la prensa independiente si creía que ante el escándalo abierto contra el imperio de Rupert Murdoch era más importante que nunca la creación y desarrollo de medios independientes para el futuro. Ante lo cual contestó: “ahora mismo no me preocupa que mi hija pueda acceder a medios independientes cuando crezca. Con la que está cayendo, me preocupa si sabrá leer” Puede pensarse exagerado, pero la realidad es que el deterioro de las condiciones y la calidad mínima de la enseñanza para la mayoría de la población se está deteriorando a marchas forzadas. Es de esperar que los recortes aumenten y se aceleren. Mientras una nueva cultura política recorre el país a lomos del 15-M, y sigue creciendo la multitud de alternativas que vienen desarrollándose desde hace años contra el pensamiento único y el dogal de la monopolización de la cultura, los recortes en Educación y Ciencia auguran la marginalización educativa y sanitaria de una parte importante de la población, y el deterioro acusado de la formación y las condiciones de vida. Todo por pagar las deudas de otros.