Cargando...De los 70.000 reclusos españoles tan sólo 5.300 son mujeres, y por este hecho soportan peores condiciones que el resto y tienen mayores dificultades para acceder a determinados servicios o programas.
El ser una minoría rovoca que tan sólo haya tres centros lo cual favorece a su dispersión y lejanía con sus familiares y en las demás prisiones mixtas ocupan casi siempre los peores módulos más pequeños y más precariosA su vez se señala que los delitos por los que están encerradas suelen ser menos agresivos que los varones y una gran mayoría están relacionados por consumo y tráfico de drogas.Y que ocho de cada diez han sufrido antes de ser detenidas, malos tratos, abusos sexuales o exclusión social. A lo que se añade la separación de sus hijos en la estancia carcelaria.Por esas razones el Ministerio de Interior e Igualdad se han aliado para establecer un plan integral, que busque solventar esta discriminación a la vez que tratar de integrar socialmente a estas mujeres en el tiempo que permanezcan en la cárcel.La iniciativa es buena sobretodo en el terreno de la discriminación, pero si que hay que tener mucho cuidado en la conclusión tan de moda en estos tiempos de “todos somos víctimas”. Es decir tal persona ha asesinado a sus padres, mujer… pero claro es que había sufrido agresiones sexuales, es que padecía esquizofrenia, es que estaba excluido socialmente…Entonces, ¿quién es la víctima el asesinado o el asesino?La etiqueta de víctima social cumple una función dañina que es restar responsabilidad individual, convertir a las personas en menores de edad donde el estado solventa y media en las consecuencias de tus actos, que poco va ayudar a que se dejen de perpetuar dichos crímenes si en si mismo ya está justificado el delito realizado. Sobretodo porque muchas personas que hayan sufrido algunas de estos problemas de ninguna manera escogen la opción del delito, sino que tiran para adelante desde una decisión personal.De esta manera si se establece un plan que busca la integración de estas mujeres en la sociedad deberá enfocarse desde la responsabilidad individual, y si tiene hijos con más razón pues deberán ganarse la responsabilidad que conlleva hacerse responsable del crecimiento del niño. Ya que el consumo o tráfico de drogas será un delito menor pero para un hijo puede tener graves consecuencias.La responsabilidad individual y mantener su autonomía es para lo bueno y para lo malo. Perderla significa estar en manos del Estado que de ninguna manera comparte tus intereses aunque se revista de estado-amigo.