En la gloria de tu madre

El querido humorista Chiquito de la Calzada ha fallecido en su Málaga natal. Fue uno de los cómicos más queridos por su estilo surrealista y su renovación del diccionario.

El programa Genio y figura lo catapultó. A partir de ese momento todo el mundo empezo a hablar en un nuevo lenguaje inventado por él. Chiquito de la calzada se convirtió en un fenómeno social. Superó la audiencia de un partido de la Champions con el Real Madrid cuando Antena 3 emitió una recopilación de sus mejores chistes.

Nació en 1932 en el barrio de La Trinidad de Málaga, popularmente conocido como la “Calzada de la Trinidad”. De ahí su nombre, chiquito por su estatura, y calzada por la calle en que nació. Chiquito llevaba desde los ocho años cantando. Empezo a cantar en los duros años de la posguerra por necesidad. Pronto empezó a bailar en compañías como los Capullitos malagueños, hasta que viajó a Japón para conseguir algo de dinero donde coincidió con otras futuras figuras del flamenco, como José Mercé. Tomás Summers le «descubrió» a los 62 años y su carrera dió un giro radical.

El escritor Luis Landero, en un artículo publicado en El País en 1995 se refirió a él como «la nostalgia de las vanguardias que se fueron». Y aún más: «Chiquito no era un bufón cualquiera. Chiquito estuvo de gira por Japón y allí aprendió a caminar con pasitos celestiales de geisha. Como Bertolt Brecht, Chiquito se quedó fascinado con el laconismo gestual y ceremonioso del Oriente. Por eso él no hace gestos completos: sólo los esboza. O los inicia y enseguida los suspende y se echa atrás, como asustado o maravillado de ellos. Chiquito es un artífice del asombro: los gestos maquinales, de los que no somos conscientes, él los interpreta como si los acabara de inventar».