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Se ha celebrado recientemente la primera edición de los Premios de la Música Independiente organizados por UFI, la Unión Fonográfica Independiente. Acto que constituye un paso adelante más en España para la consolidación de una plataforma que permita la difusión de la música al margen de las grandes multinacionales del sector. La UFI fue fundada en el 2003, hace 5 años, por 24 sellos independientes (hoy son 54) con el objetivo de crear, producir, editar y distribuir los discos fuera de los cauces de las grandes discográficas.
Cualquier sello uede ser miembro de la UFI pero su cuota de mercado no puede superar el 5%. Por tanto, la UFI está limitada a pequeños sellos y tiene un carácter antimonopolista.En su manifiesto fundacional “El galopante proceso de concentración que se manifiesta en el poder opresivo de las grandes compañías propietarias de los medios de comunicación, hace preciso que las compañías fonográficas independientes nos hagamos escuchar y cobremos una nueva influencia. Es el momento de lanzar mensajes claros que hagan que se note nuestra presencia. (…) Obviamente nuestro lema será: "¡Productores independientes de toda España, uníos!"”La industria de la música en los últimos años ha experimentado una acelerada concentración, en gran media obligada por el avance de otras formas difusión de la música y los altos precios de los CD´s.Los mecanismos actuales de distribución y comercialización de la música, no sólo en España sino en todo el planeta, son expresión de la concentración de poder en cuatro discográficas (como Sony BMG o Universal) auténticos “pulpos” empresariales que también participan de la industria de la comunicación. De hecho aproximadamente el 80% de la producción musical está concentrada en torno a estos cuatro grandes grupos de comunicación.Sin embargo, contradictoriamente, el 98% de las empresas del sector discográfico en España son Pymes, siendo estas responsables del 80% las novedades que se publican, pero cuya cuota de mercado no supera en 20%.Los premios son, pues, una iniciativa de la UFI con el objetivo de darse a conocer y promocionarse ante la sociedad; al mismo tiempo que una forma de romper el control mediático que favorece completamente a las multinacionales, otro punto de sus reivindicaciones.La UFI también forma parte de IMPALA, organismo europeo con base en Bruselas que agrupa a más de 2.500 sellos discográficos y de WIN la recientemente creada organización que agrupa a los sellos y asociaciones nacionales de compañías discográficas independientes de todo el mundo. Debate sobre la piratería y el desarrollo de la música independiente El desarrollo futuro de la UFI no está exento de contradicciones y uno de sus principales retos se da entorno a la postura que toma sobre la “lucha contra la piratería”.Aunque la UFI plantea la necesidad de “la creatividad y la independencia frente a la estandarización de la oferta musical” está contra la piratería, las descargar por Internet -que comprensiblemente les afecta en la venta de discos- y a favor del canon digital.Y en este espinoso tema son importantes las aclaraciones. La lucha contra la piratería en España está vinculada a una burguesía cultural que le hace el trabajo para los grandes emporios mediáticos, literarios y musicales que defienden la propiedad de autor… pero no para los autores (que se quedan con unos pocos céntimos de la venta de cada CD) sino para las arcas de las Majors. Como afirma la cantante Alaska “el verdadero problema son los beneficios que las multinacionales de la música sacan a los derechos de los autores e intérpretes”Es prácticamente imposible detener el avance de Internet o la música “pirata”, entre otras razones porque un disco, un DVD o un libro puede costar 20 euros recién salido al mercado. Un precio que multiplica por diez su verdadero coste de producción ¿Se espera realmente que los jóvenes, inmersos en la precariedad con sueldos por debajo de mil euros, paguen estos abusivos precios por la cultura?Si los precios fueran accesibles la piratería con toda seguridad disminuiría hasta dejar de ser un problema. En este sentido, la UFI defiende la bajada del 16% al 4% del IVA en los discos, una buena iniciativa pero insuficiente. No es aceptable que las multinacionales discográficas obtengan un 1000% de beneficios por cada CD (beneficios de los que sólo unos miserables céntimos por copia llegan a los autores) y que, al mismo tiempo, pretendan hacer pasar por inmoral descargarse una canción por Internet o comprar un disco pirata.¿Quieren acabar con la piratería? Que las multinacionales bajen los precios de la música y los productos culturales. Como señala el cantante Manu Chao “Mientras los discos cuesten más de 18 euros, el precio que deben pagar las discográficas es el negocio de las mafias”Por otra parte, aunque actualmente lo políticamente correcto es estar contra la piratería y muchos artistas españoles se han significado en contra de ella y a favor de la SGAE (muchos otros no lo han hecho) en la base social (especialmente entre los jóvenes) existe un rechazo completo a la persecución de la piratería o que las descargas por Internet sean tratadas como un delito incluso peor que un robo. España es uno de los países del mundo con mayor flujo de descargas por la red.Las prácticas policiales de la SGAE, en aras de la defensa de los derechos de autor, no han hecho más que trasladar al conjunto de la sociedad el creciente rechazo a esta política cultural oficial.Es indudable que para su desarrollo la UFI o cualquier iniciativa cultural independiente, tendrá que ganarse, entre otros sectores, a los jóvenes que son los principales consumidores de las novedades musicales, conciertos, merchandising, etc. Cogiendo la bandera de la SGAE difícilmente lo conseguirán.Muchos artistas y experiencias prácticas han demostrado como Internet es una plataforma de difusión y comercialización de música al margen de las multinacionales de la música. Muchos artistas declaran que la piratería es una forma válida de promocionar sus discos y hacer que lleguen a más gente.Es indudable que la “piratería” y las descargas musicales afectan a los sellos independientes ¿pero son estos los “enemigos” que impiden el pleno desarrollo de la música independiente, o lo son las multinacionales, discográficas o Majors que asfixian el mercado? ¿No se puede convertir Internet en un aliado, en una forma de promoción, difusión y comercialización de los sellos y artistas independientes?