Un atraco de 19.000 millones de euros

El sacrificio de los salarios

Tal y como reflejan los datos del INE de Contabilidad Nacional, estamos asistiendo a un ajuste salarial sin precedentes. En el último trimestre de 2012 los salarios cayeron un 8,5%, la mayor caí­da de toda la historia reciente, hasta dejar la media anual de rebaja salarial en el 5,8%.

Lo dijimos cuando se aprobó la reforma laboral de Rajoy: su objetivo principal no era el abaratamiento del despido (que también), sino algo mucho más estructural y dirigido a quedarse en el tiempo: una rebaja general de salarios como no se ha conocido en España desde los años de a autarquía franquista. Y eso es lo que ha ocurrido en 2012. España se ha situado a la cabeza de la UE en la reducción de salarios. Ahora se habla de que las exportaciones están paliando el desastre de la economía nacional, ¿pero quién pone de manifiesto que esta “competitividad” internacional es a costa de sacrificar los salarios y, por lo tanto, las rentas de las familias españolas?Paro y rebaja salarial, esa es la fórmula con la que se nos está haciendo pagar la crisis al 90% de la población.Un atraco de 100.000 millones de eurosDicen que los salarios han caído un 8,5% en el último trimestre de 2012, y que los beneficios empresariales han subido un 1,4% en relación al PIB, como si tal cosa.Pero ¿qué significan estas cifras traducidas a la renta de las familias trabajadoras? Que nos han expoliado nada más y nada menos que 19.000 millones de euros en el último año, para trasvasarlos a los beneficios del capital.Empezamos el siglo, año 2000, con las rentas salariales superando en 9 puntos a las rentas del capital. Ahora las rentas empresariales superan por primera vez las rentas salariales. O lo que es lo mismo, la parte de la nueva riqueza que se produce y que va a parar a los trabajadores sigue cayendo en beneficio de la riqueza de la que se apropia el capital. Las rentas salariales (44,2% del PIB) bajan por primera vez respecto a los “excedentes del capital” (el 46,1% del PIB). Si tenemos en cuenta de dónde partíamos hace diez años y adonde estamos, basta con hacer las cuentas para ver que estamos ante un trasvase de riqueza gigantesco de los salarios a las rentas de capital, más de 100.000 millones de euros en una década.Cuando uno se lo queda todo, ya no se puede hablar de “un mal reparto” en la distribución de la riqueza, sino ante “un atraco impuesto por la fuerza”, un atraco al 90% de la población. Y el problema ya no es lo que están haciendo a costa de rebajarnos los salarios, sino que están gripando uno de los motores de nuestras posibilidades para salir de la crisis.La rebaja general de salarios –junto con el paro- es el principal factor que influye en la caída del consumo interno (¡un 3% en el 2012!) que representa el 60% del PIB. Sacrificar los salarios no es el camino para salir de la crisis. La redistribución de la riqueza (que incluye la mejora de los salarios, ninguno por debajo de 1.000 euros al mes, nadie más de 10.000) es la única alternativa.

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