El Robin Hood de los ricos

El Consistorio cartagenero justificaba la medida or estar en tiempos de crisis. Poco después el IBI fue subido un 4,5% para el resto de las empresas de la ciudad portuaria, es decir la pequeña y mediana. El Ayuntamiento se baso en la estadística de crecimiento de inflación. ¿Qué ocurrió? Que la inflación finalmente solo creció poco más del uno, pero aun así a los pequeños comercios se les sube el 4,5. Simultáneamente con esto, bomberos de la ciudad portuaria solicitaban un nuevo parque para atender poblaciones cercanas que actualmente se tarda media hora en llegar desde el parque de bomberos actual. La respuesta fue que de momento no hay presupuesto. Como decíamos al inicio el Robin Hood de los ricos aparece cada vez con más frecuencia. Por su parte la oposición (PSOE) exigió que se justificara esta medida de subir el impuesto a los pequeños y rebajárselo a los grandes… O sea que el PSOE, lo que pide al ayuntamiento es que se invente una buena escusa, no es que exija su inmediata anulación, no, no, una escusa. Cartagena es una ciudad ya de por si castigada, con varios frentes ciudadanos abiertos. Desde el cierre de industria al espectacular aumento de la delincuencia o la posibilidad del cierre del hospital Rosell. Y ahora para continuar el regalo de un millón y medio de euros a los monopolios a cuenta de los pequeños comerciantes. Es de vital importancia la formación de un frente amplio ciudadano en Cartagena donde se estudie la problemática ciudadana de cada sector y se trabaje por dar una respuesta de conjunto, que evidentemente va a pasar por enfrentarse a los intereses de monopolios como en el caso del IBI. Solo reuniendo a todos los sectores sociales (sindicatos, asociaciones de vecinos, PYMES, movimiento estudiantil, organizaciones agrarias, ganaderas y de pesca, etc) se puede hacer una realidad que sean los monopolios los que paguen la subida del 4,5 y no la pequeña empresa.