El rehén de la banca

Zapatero y su cohorte de ministros son un rehén en manos de Botí­n y la gran banca. El rehén se ha propuesto convencernos de que la subida de impuestos es necesaria para garantizar los subsidios sociales y en que sólo así­ se puede atajar el déficit de las cuentas públicas. Mentira, la realidad es que las cuentas públicas han entrado en estado en bancarrota porque han acudido a respaldar los más de 350.000 millones de euros con los que el Estado ha acudido al rescate de la banca, cajas y eléctricas. Por eso hay un déficit insoportable y no hay recursos para las polí­ticas sociales, y los quieren sacar de una subida general de impuestos. El rehén intenta por todos los medios hacernos creer que «son los ricos y poderosos» los que pagan la subida de impuestos. Pero la eliminación de los 400 euros del IRPF, la subida del IVA y la penalización del ahorro desde el primer euro castigan al 88% de la población. O dicho de otra forma: serán «mileuristas», pensionistas, y rentas medias las que cargarán con el peso de la subida de impuestos.

El eso de la subida sobre las rentas del trabajo Zapatero y la vicepresidenta De la Vega siguen asegurando que “no se gravan las rentas del trabajo”. Esta es la primera mentira. ¿Pero qué es la eliminación de los 400 euros como desgravación en la declaración de la renta sino una subida del IRPF a las rentas del trabajo? Aún más, es la mayor partida de la subida de impuestos y la más segura. El gobierno recaudará directamente de todos los asalariados que hacen declaración de la Renta unos 5.700 millones de euros. Y de esos, 5.370 millones de euros saldrán de los bolsillos de las rentas del trabajo medias y bajas, o sea de los que ganan desde 12.000 euros a menos de 50.000.El gobierno hace una supresión lineal, igual para todo tipo de rentas, de los pensionistas que hacen declaración de la renta (el 50%) y “mileuristas” a las rentas más altas. Pero al hacerlo castiga especialmente a las rentas más bajas, ya que como todo el mundo sabe no es lo mismo suprimir la deducción de 400 euros a quien ingresa 60.000 euros o más de renta al año que a quien apenas llega a los 14.000. Lo que para unos es el “chocolate del loro” para la inmensa mayoría que apenas llega a fin de mes es una soga al cuello.En este caso el gobierno ni siquiera ha tenido la “decencia” de subir más los impuestos de “las rentas más altas”, como venía pronosticando Zapatero. IVA, castigo para los colectivos con menor poder adquisitivo Leire Pajín, siguiendo al líder Zapatero, ha intentado ridiculizar el impacto de la subida del IVA sobre la población jugando con que las “chuches” del niño de Rajoy “sólo subirán un céntimo por euro”. ¿Pero se ha parado la señora Pajín a hacer las cuentas de cuánto pagará a fin de año una familia media de cuatro miembros por la subida general de impuestos? ¿Más de 500 o 1.000? ¿O los 2.000 euros más que tendrán que pagar si se compran un coche? ¿O los más de 80 ó 100 euros por la compra de una lavadora?El IVA general va a subir dos puntos, del 16% al 18%, el reducido del 7% al 8% y sólo se mantiene el súper reducido de algunos productos básicos en el 4%. En términos absolutos el gobierno quiere recaudar 5.150 millones de euros que van a salir directamente de nuestros bolsillos. Los mismos sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, que están sirviendo de coartada a Zapatero, reconocen ahora que “la mayor carga va a caer sobre los trabajadores y no sobre las rentas más altas”. Y es que los sindicatos saben que el IVA es un impuesto cuyo impacto es inversamente proporcional a las rentas: a menos renta más impacto En concreto, esos más de 5.000 millones de euros saldrán de los colectivos con menor poder adquisitivo, de los 18,5 millones de pensionistas, precarios y “mileurirstas” que representan el 63% de los asalariados y autónomos. ZP, Robin Hood de los “poderosos” La cacareada subida de impuestos sobre “el capital” de Zapatero, descartadas las Sicav y otros impuestos sobre el capital, ha quedado reducida a una subida de los impuestos sobre los rendimientos del ahorro, o sea sobre los beneficios del dinero depositado en cuentas bancarias, beneficios de la bolsa o plusvalías por la venta de pisos. El gobierno sube para todos, del 18% al 19% para los beneficios inferiores hasta 6.000 euros anuales. Y hasta el 21% para quienes declaren más de 6.000 euros de beneficios.De esta partida el gobierno sólo espera recaudar unos 800 millones de euros. De nuevo la mitad de la subida recaerá sobre el 94% de los contribuyentes que declaran ingresos por rendimientos del ahorro inferiores a 6.000 euros. Y sólo otros 430 millones de euros espera recaudar, según la ministra Elena Salgado, de los que declaran por encima de los 6.000 euros.O sea que la subida de impuestos para los “ricos” queda reducida a que paguen poco más de 400 millones de euros más. Mientras todos los demás pagaremos más de 11.000 millones por la subida de impuestos. Zapatero no toca ni las Sicav, que seguirán contribuyendo al indignante 1%, ni las rentas superiores a los 60.000 euros que pagaran como un “mileurista” cualquiera, ni los grandes patrimonios tendrán que volver a pagar.