SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

El PP evita investigar Caja Madrid para no perder más votos

El Partido Popular ha vuelto a rechazar la constitución de una comisión de investigación sobre Caja Madrid como proponían PSOE, IU y UPyD. Niegan a los ciudadanos el derecho a saber. La justificación dada por el portavoz económico del PP en el Congreso de los Diputados, suena a chirigota. Dice Vicente Martínez Pujalte que «todas las decisiones en Caja Madrid y la fundación se han tomado por unanimidad». Pues con más razón. Los ciudadanos tienen derecho a saber qué parte de responsabilidad corresponde a los respectivos miembros de los distintos partidos políticos que estaban presentes en el consejo de la caja. Aunque no todos en el Partido Popular, incluidos gestores que llegaron más tarde a la Caja piensan igual, se ha impuesto la ley del silencio.

Pero con resultar llamativo el argumento anterior no deja de sorprender que Pujalte trate de justificar la negativa del partido argumentando que la entidad «que más dinero le va a costar al contribuyente» es CaixaCatalunya, «que estaba dirigida» por personas nombradas por las administraciones socialistas, y con cuyas cuentas de resultados «se pagaban favores políticos». Pues también tenemos derecho a saberlo. ¿Pero no se ha detenido a leer algunos de los mail mencionados de Blesa?

Además en el Parlamento de Cataluña ya se está investigando lo sucedido allí con el sistema financiero. ¿Por qué no se puede hacer en el Parlamente de la nación, sobre todo una vez que se han conocido parte de los mails corporativos que enviaba y recibía el presidente de la Caja, Miguel Blesa, en los que según expertos juristas pueden haberse cometido los delitos de tráfico de influencia, abuso de poder, administración desleal y otros eventuales delitos?

Pujalte está obligado con más razones que otros muchos a defender que se investigue lo sucedido. Como denuncian en su libro ‘El banquete’, tres periodistas de investigación, junto con el ahora ministro de Economía defendía todavía en el 2010 las bondades de las cajas de ahorros españolas. Recuerdan los autores del libro que en la presentación de su libro, ‘Pasado, presente y futuro de las cajas de ahorros, De Guindos, que acudió a presentarlo a Pamplona acompañado de Martínez Pujalte, defendía que la recesión había quedado atrás y que los bancos y las cajas de ahorros española han superado la crisis mucho mejor que lo que ha ocurrido en muchos países europeos.

Estamos hablando del 2010. Junto a Martínez Pujalte De Guindos defendía que «las cajas de ahorro son una historia de éxito en nuestro país y pueden seguir siéndolo». Para añadir que lo que estaba haciendo Caja Navarra «al unir cajas de distintas comunidades en un proceso de integración de servicios, pero manteniendo las marcas, es el camino adecuado. Hoy se puede decir que la CAN es una caja que está siguiendo un proceso de reformas que la situarán en el futuro». Que Dios les conserve la vista.

Tiene razón el diputado socialista Antonio Hernando, cuando dice que en cualquier país de nuestro entorno cultural, social y económico no habría dudas de que un escándalo como el de la caja madrileña debe examinarse en el Congreso de los Diputados. Como la tiene la portavoz de UPyD, Rosa Díez, al asegurar que ha habido bastante retraso a la hora de exigir responsabilidades a los culpables de hundir las cajas de ahorro, y defender como cada vez más oportuna la creación de la comisión de investigación.

Los argumentos de CiU no pueden ser más contradictorios. Dice que se niega a pedirla por coherencia política ya que acostumbran a dejar en manos de los magistrados las cuestiones que están siendo investigadas en los juzgados, y mantienen una comisión en el Parlament al tiempo que está investigando la Justicia la situación de CaixaCatalunya.

Resulta lógico querer saber lo sucedido en Caja Madrid antes de que corran más peligro las pruebas. Parece más que lógico que se abra una investigación pública, para lo que no existe mejor institución que la sede de la soberanía nacional. La investigación veraz en el Parlamento, donde el libre acceso a los medios de comunicación sirve de garantía de que habrá la máxima transparencia. Se creo por el caso Banesto y su desequilibrio patrimonial era infinitamente menor que el que se ha generado en Caja Madrid. De no hacerlo no tendrán sencillo recuperar la credibilidad de los ciudadanos, porque queremos saber lo sucedido. Aunque el momento previo a unas elecciones, aunque sean las europeas, les haga aconsejable rebajar al máximo la transparencia informativa sobre lo sucedido en las cajas.

Deja una respuesta