El mensaje… ¿de austeridad?

La viceresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, no descarta que el Gobierno adopte nuevas medidas para enviar un mensaje de austeridad en el gasto. Lo de lanzar un mensaje huele a campaña publicitaria más que ha desarrollar medidas urgentes para romper los suntuosos gastos a los que están acostumbrados los altos cargos de las diferentes administraciones. Si los ciudadanos no necesitamos mensajes de austeridad para apretarnos el cinturón, de eso ya se encargan los bancos y los empresarios, las administraciones públicas si que tienen que lanzar mensajes porque ya nadie se cree que la burocracia pueda ser austera. ¿Esto quiere decir que no van a dar más millones del erario público a los bancos? ¿O que van a devolver los 700.000 euros presupuestados por Magdalena Alvarez en Fomento para remodelar el ministerio? ¿ O los 60.000 euros gastados por la propia vicepresidenta para remodelar sus aposentos de Moncloa? ¿Se van a bajar sus señorías los sueldos? ¿O la austeridad pasará por congelar los salarios de los funcionarios públicos o por no invertir más en sanidad, cultura o educación?. Dice que no habrá recortes en política social, pero que se lo digan al invidente de Barcelona que recibe un céntimo al mes de ayuda social por la famosa y manoseada Ley de Dependencia. De austeridad sabemos más que nadie, que remedio nos queda, lo de la vicepresidenta suena a caramelo envenenado con olor a Chanel.