Las elecciones municipales marroquí­es en territorio saharaui, represión, torturas, compra de votos...

¿El limite del pueblo saharaui?

Es la respuesta a un estado que les ignora y les margina, por lo que han acordado mantenerse al margen de sus juegos electorales, que en estas últimas elecciones se ha dado un aumento de la represión, la corrupción, la compra de votos, usurpación de identidades, recogida de la tarjeta electoral por parte de los apoderados de los partidos, etc.

El embajador de la Reública Árabe Saharaui Democrática (RASD) en Argel, Brahim Ghali, En declaraciones a la radio estatal argelina, afirmó que el pueblo saharaui se encuentra "al borde de la línea roja" en su conflicto con Marruecos y que su paciencia "ha llegado al límite".Ghali dijo que la ONU "debe saludar el espíritu de colaboración" del Frente Polisario desde 1988, pero advirtió que el pueblo saharaui "ha hecho suficientes concesiones" a las Naciones Unidas "y no está dispuesto a hacer más".A su juicio, la ONU se encuentra ante dos opciones: dejar que la situación "empeore" o ejercer presiones sobre Marruecos para avanzar en la aplicación de las resoluciones del Consejo de Seguridad y permitir a los saharauis expresar libremente su opción.Asimismo, indicó que Marruecos quiere organizar un referéndum en torno a una sola cuestión sobre su propuesta de autonomía, lo que estimó "contradictorio con la naturaleza del conflicto" y recalcó que los saharauis "no consentirán más sacrificios" por la independencia del Sahara Occidental."La asociación de los territorios ocupados a las elecciones marroquíes es un intento por el que Marruecos pretende empujar la situación hacia la escalda", dijo y consideró que "el silencio de la ONU" ante esta situación "es como tapar un acto criminal".Así mismo Mohamed Sidati, ministro delegado para Europa de la RASD y miembro del secretariado nacional del Frente Polisario en una declaración remitida el pasado jueves a las autoridades de la UE."Este es un acto ilegal, recuerda una vez más la voluntad de Marruecos de proseguir su política colonial en el Sáhara Occidental", "Marruecos está tratando de imponer en el territorio y a su población unas elecciones carentes de toda validez jurídica”.Sidati recordó que el "Sáhara Occidental es, de hecho, un territorio no autónomo que está sujeto a un proceso de descolonización, de exclusiva responsabilidad de las Naciones Unidas, y que Marruecos, como ha señalado acertadamente la Corte Internacional de Justicia en su dictamen de 16 de octubre de 1975, no tiene derecho a la soberanía".

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