EE UU critica el aumento del presupuesto militar Chino

El imperio y sus Procónsules

Los datos son significativos: los gastos en defensa externa y seguridad interna (homeland security) de Estados Unidos son hoy equivalentes a la suma de los presupuestos militares de todos los paí­ses del mundo.

El resupuesto militar chino aumentará 14,9% en 2009 respecto al año anterior, anunció hoy el portavoz del Parlamento Li Zhaoxing, que aseguró que se trata de un incremento modesto. Los gastos militares del gigante asiático se elevarán este año a 480.680 millones de yuanes (unos 70.200 millones de dólares), es decir 6,3% del presupuesto general, precisó el responsable en una rueda de prensa. Estados Unidos critica a menudo el presupuesto de Defensa chino por considerarlo poco transparente. El portavoz del Parlamento subrayó que los gastos militares chinos suponen apenas 1,4% del Producto Interior Bruto, frente a «una media de más de 4% en Estados Unidos y más de 2% en paí­ses como Gran Bretaña y Francia», según declaró. Si Washington se auto proclama transparente en su gasto militar y pone el grito en el cielo por el aumento del presupuesto chino o el Ruso. Veamos en los hechos si es tan transparente y con que derecho critica el gasto militar ajeno cuando EE UU el solito tiene casi la mitad del gasto militar mundial.EE UU dispone de 450.000 efectivos militares en el mundo, casi la mitad empeñada en situaciones de combate, cuenta con 825 instalaciones militares en diversos lugares del planeta (15 grandes, 19 medios y 826 de menor volumen), 5 comandos funcionales (entre ellos los tristemente célebres Comando Sur y la IV Flota) y 5 comandos geográficos, a los cuales se ha agregado el recientemente creado AFRICOM.El presupuesto de defensa es 15 veces mayor que el destinado al Departamento de Estado, y el Pentágono dispone de 200 veces la cantidad de personal de ese Departamento. Los militares supervisan más del 20% de la asistencia externa destinada a fondos para el desarrollo y disponen de grandes sumas para financiar centros de investigación para implementar las polí­ticas que imponen para corromper funcionarios. En cuanto a la parte industrial del proyecto su magnitud no puede ser descrita, pues sólo la industria de armamento mueve cifras siderales.En conclusión, parafraseando a Eisenhower, un gran poder en desarrollo y en capacidad de imponer de cualquier manera sus objetivos.Por ahora, la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca insiste en que la partida del Departamento de Defensa se fije en 527.000 millones de dólares para el año próximo. El gobierno de Bush habí­a considerado necesario un aumento de ocho por ciento en el presupuesto militar del año en curso. Esa suma, que no incluye los aproximadamente 170.000 millones de dólares asignados por Washington a la denominada «guerra mundial contra el terrorismo», en especial en Iraq y Afganistán, ya constituye más de 40 por ciento de los gastos militares totales del mundo. Los números del presupuesto pueden ser algo confusos. Por ejemplo, las peticiones del presupuesto del ejercicio económico de los EE.UU. para el gasto militar no incluyen los costes de combate (los cuales son peticiones suplementarias que el Congreso aprueba de forma separada).Los presupuestos para armas nucleares recaen bajo el Departamento de Energí­a, los cuales para el año 2009, son de 29.000 millones de dólares.»El Congreso ha aprobado ya cerca de $700.000 millones de dólares, en fondos suplementarios para operaciones en Irak y Afganistán y unos adicionales $126 billones del año fiscal del 2008, los cuales quedan todaví­a por aprobar por La Casa y el Senado, para las inversiones para la guerra».Además, otros costes como el cuidado de los veteranos, el cuidado sanitario, la ayuda y el entrenamiento y las operaciones secretas, recaerán bajo otros departamentos o serán contados de manera separada.Los datos son significativos: los gastos en defensa externa y seguridad interna (homeland security) de Estados Unidos son hoy equivalentes a la suma de los presupuestos militares de todos los paí­ses del mundo.En la tierra nadie posee más armas nucleares que EE.UU., ni hay otro paí­s que haya adoptado como parte integral de su doctrina el ataque preventivo (incluido el uso de armamento nuclear contra Estados que no lo poseen).Los comandos regionales (en particular, los que cubren nuestro hemisferio, el Pací­fico, el Medio Oriente y Asia Central) se han transformado en auténticos procónsules territoriales.Mientras tanto, la influencia corporativa, a expensas del Departamento de Estado, ha crecido tanto que la legislación de 2006 permite que el Departamento de Defensa brinde ayuda militar directa a las fuerzas armadas de otro paí­s y estacione grupos de tareas especiales en embajadas estadounidenses en «paí­ses inestables» para «desorganizar, capturar o matar» terroristas.

Deja una respuesta