SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

El Gobierno, dividido por Iberia

Los ministros del Gobierno de Mariano Rajoy involucrados en el futuro de Iberia tienen posiciones enfrentadas sobre la solución a dar a la compañía aérea. Alguno de ellos, apoyado por gestores de las empresas directamente involucradas en el accionariado de Iberia, está en completo desacuerdo con mantener al presidente y al consejero delegado al frente de la compañía, Antonio Vázquez y Rafael Sánchez-Lozano, cuyos ingresos les parecen desmesurados, aunque recientemente han sido reducidos voluntariamente como gesto por las medidas salariales anunciadas. Recuerdan desde el entorno empresarial del ministerio de Hacienda que Antonio Vázquez presidía Tabacalera cuando se integró con la tabaquera gala para crear Altadis.

Y que Sánchez-Lozano procede del ámbito ejecutivo de Caja Madrid, la entidad financiera española que ha necesitado la mayor ayuda de toda la historia de las finanzas españolas para no quebrar.

Cristobal Montoro quiso que sus emisarios alcanzaran acuerdos con Vázquez, pero este habría respondido que Rodrigo Rato, como presidente del Bankia, había sellado con él otro tipo de pacto. El caso es que mientras las empresas españolas que él gestiona pasan a manos extranjeras, él acaba siempre en posición de ganador. Aunque Rato ya no sigue el frente de Bankia, la cuestión no parece haber cambiado, al menos de momento.

El pasado ejercicio, Vázquez recibió de AIG unos 900.000 euros. 645.000 de sueldo fijo y otros 235.000 euros por cumplimiento de objetivos. Como compensación al abandonar la compañía tiene garantizados otros 2,8 millones de euros. Con motivo del anuncio del ERE, el consejo de Iberia se auto redujo sus retribuciones.

Saben en Fomento, en Industria, en Hacienda y en Empleo que la solución es muy complicada. Romper el acuerdo con British Airways conllevaría un coste muy elevado, de acuerdo con las clausulas confidenciales que figuran en los acuerdos. Tras los informes contradictorios que obran en manos del Ejecutivo no cuadran las diversas alternativas que se plantean.

Entre los partidarios de romper el acuerdo con British están quienes consideran que así como el resto de países europeos mantienen líneas con todos los países de las antiguas colonias, y algunos de ellos son claramente deficitarios, España debería hacer lo mismo.

También recurren al ejemplo de que no se pueden estar iniciando los contacto previos informales con las instituciones europeas por parte de los países del Golfo para alcanzar acuerdos que lleven en su día a la firma de tratados de cielo abierto y en cambio no permitir ayudas a las compañías nacionales que permitan en su día poder competir con las Qatar Airways de turno. Recientemente altos miembros del consejo de Qatar Airways han visitado Bruselas y Estrasburgo de cara a mantener los primeros contactos con miembros del Parlamento Europeo y de la Comisión Europea.

También los diputados

Diputados populares discrepan no solo con el proyecto de reestructuración de la compañía, sino con la argumentación de la asesora PriceWaterhouse. Aseguran que una parte de los argumentos de la consultora, según la cual no hay futuro para Iberia en las actuales condiciones de gestión y funcionamiento, están desmentidos por los nuevos hechos en Estados Unidos. En la otra parte del Atlántico, tras años de confrontación han logrado un sistema en el que pueden convivir las empresas aéreas tradicionales, con un alto nivel de servicios, con las low cost. Hasta ahora, apuntan estas mismas fuentes, Y es lo que no han sabido armonizar en el proyecto español ni Iberia ni sus asesores.

Mientras siguen debatiendo el futuro de la que fuera primera compañía aérea española, la primera jornada de huelga en protesta por el plan de reestructuración de Iberia ha contado con un seguimiento masivo, casi un 100 por 100 de los trabajadores que no tenían que acudir a los servicios mínimos.

Iberia ha operado la mayoría de los 135 vuelos programados, los garantizados en los servicios mínimos, mientras otros 81 se han quedado en tierra. Se han visto afectados unos 14.000 clientes.

Pese a las aparatosas imágenes por la intervención de las fuerzas de seguridad, según Iberia el primer día de huelga programado ha transcurrido sin incidencias significativas, a excepción de la manifestación en la zona de facturación de la terminal T4 de Madrid-Barajas y que ha concentrado según las estimaciones más elevadas a unos 8.000 trabajadores.

Debido a los incidentes la Policía ha detenido a cinco personas, tres empleados de tierra y dos tripulantes de cabina.

Los trabajadores de Iberia aconsejaban volver a visionar la conferencia del presidente Antonio Vázquez en el Foro de la Nueva Economía para explicar el futuro de la sociedad. Qué malo resulta poder consultar las hemerotecas y las videotecas para quien defiende el valor de su palabra.

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