Cargando...Los preparativos para un posible ataque aéreo internacional sobre Siria se aceleran. Las potencias occidentales han informado a la oposición siria de que la intervención militar puede ser pronto, tan pronto como en unos días, según informaron a Reuters fuentes que asistieron a la reunión entre los enviados internacionales y la Coalición Nacional Siria (CNS).
«A la oposición se le dijo claramente que la acción para disuadir al régimen de El Asad de volver a usar armas químicas puede ser tan pronto como en unos pocos días y que aún deben estar preparados para [celebrar] conversaciones de paz en Ginebra [Suiza]», dijo a la agencia una fuente de la reunión.
A la reunión entre el núcleo duro de los llamados amigos de Siria y la oposición han asistido el exembajador de EEUU en Siria Robert Ford (representante de la Administración ante los opositores sirios) y el presidente de la CNS, Ahmad Jarba.
Estados Unidos prepara una operación limitada en el tiempo y en los objetivos, según el Washington Post. El diario sostiene que el ataque, probablemente de no más de dos días, sería perpetrado con misiles lanzados desde el mar contra objetivos militares, no necesariamente vinculados al programa de armas químicas. El objetivo, según un análisis de la agencia Reuters, sería más bien lanzar una advertencia a El Asad, darle una lección, más que cambiar el curso de la guerra.
Ante la acumulación de indicios de un posible ataque, un alto cargo de la Administración estadounidense ha advertido de que el presidente Obama aún no ha tomado una decisión sobre un ataque militar a Siria.
El Parlamento británico ha adelantado al jueves la primera sesión parlamentaria después de las vacaciones de verano (prevista en un principio para el lunes, 2 de septiembre) para decidir si intervenir militarmente en Siria. La sesión se celebrará al día siguiente de la reunión del Consejo de Seguridad Nacional, compuesto por el primer ministro, David Cameron, el viceprimer ministro, Nick Clegg – que ha suspendido un viaje a Afganistán – los ministros de Defensa, Interior, Exteriores y Hacienda, así como varios secretarios de Estado, los altos mandos militares y los jefes de las agencias de información. Allí se discutirán los planes elaborados por el Ejecutivo de Cameron para una eventual acción militar.
El Gobierno responde así a las peticiones de la oposición laborista, que le pedía explicaciones en sede parlamentaria antes de cualquier intervención en Siria, a pesar de que el Ejecutivo de Cameron no tiene la obligación legal de hacerlo. «Aún no estamos preparados para firmar un cheque en blanco al Gobierno», ha afirmado el responsable laborista de Defensa, Douglas Alexander, en el programa matinal de la BBC.
Alexander pidió a Cameron que explicase en el Parlamento cuales son sus objetivos estratégicos: «¿Cambiar el rumbo de la guerra civil e intentar derrocar a Bachar el Asad [el presidente sirio] o simplemente degradar su capacidad de usar armas químicas impunemente?», preguntó. Varios diputados conservadores también pidieron una intervención parlamentaria. «Necesitamos tener un propósito claro», afirmó el diputado Adam Holloway. «Ambos bandos han hecho cosas espantosas».
El ministro alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, ha afirmado que si se confirma el uso de armas químicas en Siria «la comunidad internacional debería actuar». «Alemania estará entre los que consideran que tiene que haber consecuencias», ha declarado el ministro durante una reunión anual con los embajadores alemanes. El canciller turco, Ahmet Davutoglu, tras una entrevista con Westerwelle en Berlín, ha pedido una intervención internacional en Siria tras declarar que «las líneas rojas se han superado muchas veces». Turquía, país fronterizo con Siria, ha respaldado a los rebeldes contra el Gobierno de Bachar el Asad en numerosas ocasiones.