Cargando...El año pasado se embargaron 100.000 casas familiares. Es precisamente en los barrios más marginales donde se les planta cara. Es todo un ejemplo de solidaridad vecinal y firmeza en la defensa de lo de uno y lo de su vecino.
Que no nos tiemble el ulso.100 vecinos de Espinardo (Murcia) evitan un desahucio. María Contreras y sus 4 hijos consiguen un aplazamiento de la orden de desahucio por la posibilidad de que las protestas vecinales acaben en desordenes públicos María Contreras, de 26 años, y sus cuatro hijos, de entre dos y nueve años, viven en una vivienda de protección oficial en la Plaza de la Constitución, en la pedanía del Espíritu Santo en Espinardo (Murcia). La vivienda está a nombre del padre de su cuñado y Servicios Sociales sospechó que podría haber habido una transacción comercial. Estuvo claro, sospechas de que le ha dado unas “perras” al padre de su cuñado por vivir en la casa ella y sus cuatro hijos, pues a la calle y por orden judicial. La orden decía que ayer a las doce de la mañana debía desalojar la casa incluso quitando la cerradura de la puerta si hiciera falta. El barrio, uno con la tasa de las más altas de Murcia en problemas relacionados con la droga, lo tuvo claro, María y sus chavales no se mueven de la casa. Pues muy bien, todos tenemos que aprender de ello, de cómo hay que defender lo que es de uno o del vecino. ¿Qué es lo que pretenden los Servicios Sociales?, ¿dejar a cuatro niños en la calle? Este es el precio de la irregularidad si eres gitano y vives en un barrio marginal. parece por los hechos que a esto se dedican, entre otras cosas, los Servicios Sociales de Murcia. Luego vendrá el quitarle la custodia de los niños porque no tiene casa o un año y medio de cárcel por robar una barra de pan como le paso a un mendigo en Badalona hace unos días. Curioso nombre el de la plaza donde vive María, Plaza de la Constitución, el libro donde dice lo del derecho a la vivienda digna. Curioso nombre el de las instituciones que han llevado los proceso de desahucio, Servicios Sociales y Tribunal de Justicia Pues ahora son los vecinos del barrio, unos gitanos otros no, los que han tenido que defender la justicia, los derechos de la Constitución y los servicios sociales para María y sus niños. La manifestación fue pacifica, los vecinos fueron a la casa y se plantaron en la puerta. Pues esto es lo que hay que hacer en cada desahucio sea por burocracia o por impago de hipoteca. Este año hubo más de 100.000 desalojos en toda España por impago de hipoteca. ¿Donde están ahora mismo todas esas familias? Unas viviendo en casas de familiares y buenos amigos, durmiendo cuatro en una habitación; otras en la calle. A ellos (los bancos y las instituciones) no les tembló el pulso para que 100.000 familias se vallan a la calle. Que a nosotros no nos tiemble el pulso para que, frente a cada desalojo, nos manifestemos “pacíficamente” como los vecinos de Espinardo. Vecinos de Espinardo sigan así, no permitan que le quiten la casa a María, ni a sus niños.