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El Festival Imagine India con la colaboración de Casa Asia organiza una retrospectiva con lo mejor del cine de Oriente. Casi 80 films de 18 países diferentes, centrándose en la India pero con un interesante programa de cine asiático en general y cine internacional, este año dedicado al cine Australiano, el experimental ruso y el cine sobre Gitanos, además de un montón de actividades paralelas. Es el nuevo cine que llega.
Pero mientras la BBC y la Voz de América controlaban Oriente Próximo y Euroa, EEUU nunca consiguió controlar Asia. Ni el Capitán América ni toda la factoría Marvel reinaron en tierra de dragones. Ni Superman, ni Hulk, las quijotescas aventuras del Rey Mono, el personaje más popular de la literatura oriental, se escenificaban en la Revolución Cultural en China. Japón era entonces el único país que no necesitaba importar películas para cubrir su mercado nacional. Entonces directores como Kurosawa en Japón o Satyajit Ray en India influyeron en cineastas de las antípodas. Hoy a la emergencia de nuevas economías, antes países del tercer mundo y hoy potencias emergentes como China, India o Corea entre otros le acompañan nuevos cines que nos traen la mirada de Oriente. De la Barraca a Bollybood Bollywood produce anualmente cerca de 600 largometrajes en más de 14 idiomas. Su historia está íntimamente unida a la historia política del país. La anhelada independencia india del Imperio Británico marcó el principio de la edad dorada del cine indi. Si bien India se liberó del yugo inglés, tampoco los americanos pudieron penetrar en una de las cinematografías más potentes. La industria cinematográfica en la India ha contribuido a construir una identidad nacional. Algunas de las mejores películas indias se realizaron durante los años 40, la independencia fue una época determinante para la industria del cine. La llegada de Satyajit Ray y su clásico Pather Panchali en 1955 fue un punto de inflexión, que abrió un nuevo camino para el cine indio, ya que fue la primera película reconocida internacionalmente, obteniendo un premio en Cannes. Qazi Abdur Rahim, comisario del festival explica: “Fue una gran alegría pues nos liberamos de la gran potencia mundial, no estábamos luchando contra los portugueses sino contra los ingleses. La independencia no llega en el 48 como desenlace de la Segunda Guerra Mundial. No es cierto, se fue cociendo mucho antes. Los ingleses formaron a muchos hindús para poder administrar el país en las universidades y son éstos quien poco a poco tomaron conciencia. El marxismo se difundió en las Universidades y de repente siguiendo el ejemplo español de la Barraca de García Lorca surgieron numerosos grupos de teatro que viajaban por todo el país llevando el teatro al pueblo. Las ganas de construir otra sociedad se contagió del teatro al cine. Grandes directores firmaron grandes películas en esos años. Fue la Edad de Oro de Bollywood sin duda. El posterior desarrollo político que tiene lugar en India se estancó. En los 70 hay una gran desilusión del país y eso se refleja en la calidad de las películas producidas esos años, desaparecieron los héroes que daban la vida por su pueblo, los nuevos protagonistas eran traficantes, villanos… “ Quizá las historias y tramas de Bollywood resultan muy lejanas o azucaradas para el público español pero las grandes historias de amores imposibles, el primer amor, el desamor… son un éxito en una sociedad caracterizada por los matrimonios de conveniencia y la sociedad de castas. La emergencia económica del país se está reflejando en un cine cada vez más complejo y diverso. Hoy se está desarrollando un cine alternativo en respuesta a Bolllywood, incluso el mismo Bollywood se da cuenta de que no se pueden hacer películas sin guion. Nuevas protagonistas femeninas se enfrentan a nuevas aventuras fruto de una sociedad más dinámica donde el papel de la mujer está cambiando. Grandes figuras Kumar Shahani Uno de los cineastas más importantes de la India en la actualidad. Nace el 7 de diciembre de 1940 en Larkana, Sindh (ahora en Pakistán). Se gradúa en Ciencias Políticas e Historia en la Universidad de Bombay y estudia escritura cinematográfica y dirección en el Film and Television Institute of India con Ritwik Ghatak como profesor. Después marcha a Francia a estudiar en el IDHEC y asistirá a Robert Bresson en la película Une femme douce. Al regresar a la India realiza su primer largometraje, Maya Darpan, en 1972, teniendo que esperar doce años para conseguir la financiación necesaria para realizar su segundo largometraje, Tarang. Maya Darpan está considerada la primera película formalista india. Shahani ha desarrollado un idioma épico que entronca con cuestiones contemporáneas. Sus películas exploran la memoria cultural integrada en la India más clásica a través de sus formas artísticas, sus textos y sus objetos. Su exploración visual de la música y la danza india, de la épica clásica y la literatura contemporánea marcan su trabajo como único en la historia del cine indio. Sus trabajos también tienen influencias de las tradiciones cinematográficas europeas. Su obra está considerada al lado de directores renovadores como Pier Paolo Pasolini, Andrei Tarkovsky, Stanley Kubrick, Jacques Rivette. Satyajit Ray Fue un director de cine indio, considerado uno de los grandes artistas del siglo veinte, a causa de su estilo sutil, austero y lírico de dirección de películas. Ray nació en una importante familia bengalí de literatos y artistas. Se graduó en el Presidency College de Calcuta y estudió bellas artes en la Visva-Bharati University, en Santiniketan. Fue atraído por la cinematografía tras conocer al cineasta francés Jean Renoir y ver la película neorealista italiana El ladrón de bicicletas durante una visita a Londres. El debut cinematográfico de Ray, Pather Panchali (La canción del camino), ganó once premios internacionales incluyendo el Mejor Documento Humano en el Festival de Cine de Cannes. Junto con Aparajito y Apur Sansar, Pather Panchali forma la Trilogía de Apu, la obra maestra de Ray. Ray estaba profundamente afectado por la gente y las condiciones socio-económicas reinantes en Bengala, y aunque sus películas tienen un interés humanista universal, la vida de las diversas clases sociales de Bengala, el conflicto de los nuevos y antiguos valores, y los efectos de las rápidamente cambiantes condiciones económicas y políticas de la India son algunos de los temas recurrentes en su obra. Ray fue un cineasta prolífico y dirigió treinta y siete películas en su vida, comprendiendo largometrajes, documentales y cortos. Ray recibió muchos importantes premios de cine en su ilustre carrera, incluyendo un Óscar Honorífico en 1992, poco antes de morir.