SELECCIÓN DE PRENSA INTERNACIONAL

Cumbre europea: golpe de fuerza de Italia y España

Frente a la intransigencia de Roma y Madrid, los europeos finalmente han aceptado el principio de una recapitalización directa de los bancos y un mecanismo para aliviar la presión sobre las deudas de ambos países. Se pondrá en marcha un supervisor bancario europeo.¿Han hecho chantaje Italia y España? «Esta no es la palabra», respondió a la una de la mañana, François Hollande, en una conferencia de prensa a mitad de camino de las negociaciones. Sin embargo, viendo la manera cómo Madrid y Roma han cambiado el orden del día de la cumbre de la UE para finalmente llegar a un acuerdo de los miembros de la zona del euro, es difícil encontrar otra expresión. Los dos países, para sorpresa de todos, se negaron en un primer momento a apoyar el pacto de crecimiento que, sin embargo, habían sostenido la semana pasada en Roma, con el fin de obligar a sus socios a encontrar un dispositivo para aliviar sus costos de endeudamiento.Así que los miembros de la zona del euro tuvieron que improvisar una mini-cumbre después de la medianoche, una vez que abandonaron el salón los representantes de los diez países que no han adoptado la moneda única, a fin de satisfacer a Mario Monti, el primer ministro italiano, y a Mariano Rajoy, el primer ministro español. Los dos líderes no quisieron esperar a la comida a diecisiete preparada para hoy para hacer frente a este problema, a sabiendas de que Angela Merkel ya tendría la cabeza en Berlín. De hecho, por la tarde debe estar presente en el Bundestag, que debe aprobar el pacto de estabilidad presupuestaria y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (SS), dos textos clave de la nueva gobernanza económica europea.La táctica dio sus frutos. Sobre las cinco de la mañana, los Estados de la zona euro han dado a luz a un compromiso que atiende muchas de las pretensiones de Roma y Madrid. Así, los países acordaron crear lo más rápidamente posible un supervisor común para todos los bancos europeos, que implican de una forma u otra al BCE. Cuando el supervisor esté establecido, entonces el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MES) «será capaz de recapitalizar los bancos directamente», dijo Herman van Rompuy, presidente de la UE. Una medida recamada por España, de la que sin embargo no se podrá beneficiar de inmediato, sino más bien en «un horizonte a medio plazo», según una fuente europea.Inicialmente, la ayuda a España para rescatar a su sector bancario será por un circuito convencional, a través del brazo financiero actual de la UE, el EFSF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera). A continuación, el apoyo se cambiara al MES cuando entre en funcionamiento, sin acceso a la condición de acreedor preferente. Esto último también fue demandado por Madrid, para no asustar a los mercados.Por último, la zona euro ha acordado esta medianoche lo que Francois Hollande calificó como «un mecanismo de intervención para permitir que los países más virtuosos, de acuerdo a los Tratados existentes, obtengan las tasas más bajas de endeudamiento». Claramente, que los buenos alumnos que cumplan con las exigencias presupuestarias de la UE tendrán acceso al MES para respaldar sus obligaciones en los mercados financieros. Esto se hará «con flexibilidad», dice José Manuel Barroso, Presidente de la Comisión, dejando entender que no habrá un nuevo programa de saneamiento de la troika para beneficiarse de él. «Ofrecemos la posibilidad de que los países que se desempeñan bien, utilicen los instrumentos de la estabilidad financiera con el fin de tranquilizar a los mercados», dijo Herman van Rompuy.Sin embargo, Mario Monti, no ha dejado de hacer valer a sus socios que su país ha adoptado todas las reformas estructurales exigidas por Bruselas, desde la reforma del mercado de trabaj hasta el aumento de impuestos. Es por eso que propone que el fondo de rescate europeo compra directamente deuda italiana y española cuando se emita, llamando a la formación de un «escudo anti-prima de riesgo.»Este compromiso de la zona euro prepara el camino para un acuerdo sobre estabilidad y crecimiento, incluyendo el monto final fijado en 120.000 millones de euros. Un «paso preliminar necesario e indispensable», según François Hollande, para que Francia ratifique el Pacto Fisca. El jefe de Estado también llamó a una «visión a mediano plazo» de la unión económica y monetaria europea.Sobre este último punto, el informe de Herman van Rompuy –previendo una unión bancaria, fiscal y económica– es citado como base para la reflexión. La misión del presidente de la UE es presentar una hoja de ruta más detallada en octubre. «La zona euro no puede permanecer en la condición en la que está, es decir, sin una unión fiscal, pero sobre todo sin una unión bancaria», aseguró Francois Hollande. Éste es partidario de una política económica común. Sin embargo, la palabra federalismo no ha sido usada por el jefe de Estado, sólo el término «solidaridad e integración.» «La Unión política que se evoca ahora no tiene, sin embargo, ningún contenido, así que ya veremos», concluyó.

Deja una respuesta