Un año después de entrar en funcionamiento, en julio de 2008, la anunciada a bombo y platillo por el gobierno «tarifa social eléctrica» apenas llega a menos de 20.000 hogares. Una respuesta del gobierno a una pregunta de control parlamentario sobre esta tarifa ha permitido conocer que a estas alturas sólo la tienen 19.730 consumidores. Otros 2.039 están a la espera de que se resuelva su expediente.
El ministerio de Industria resentó hace un año la creación de esta “tarifa social eléctrica” como la demostración de que el recibo de la luz no subiría para 3,6 millones de hogares con rentas más bajas, aquellos que tuvieran una potencia contratada menor de 3 Kw., indicativa de que sus viviendas no disponen, por ejemplo, de calentadores, cocinas o calefacción eléctricos.Los datos demuestran una escandalosa realidad: que la subida de la luz (más de un 16% de media en el último año) es general para el conjunto de la población, incluidas las familias con menores rentas. ¿Menos de 20.000 de casi 4 millones, señor ministro, no es un gran engaño, un cuento chino más?Utilizaron la “tarifa social” como un anzuelo para vender la subida de la luz, pero las innumerables trabas para su aplicación (como la necesidad de que la vivienda cuente con un interruptor de potencia, que sólo tienen las viviendas de nueva construcción) hacen que de echo todos paguemos la subida