La indignación ha ido creciendo más y más con cada noticia que ha ido conociéndose acerca de los bochornosos detalles de la agenda de Carlos Mazón y de sus principales colaboradores el 29 de octubre, cuando la dana se cernía sobre Valencia.
Esta es la secuencia de los hechos, más o menos en orden cronológico, del dìa 29 de octubre, en el que Valencia sufre el desastre de la Dana
- Los primeros avisos de la AEMET son del miércoles 23 de octubre, donde ya hablan de la próxima «formación de una Dana». El viernes 25 de octubre la AEMET reitera su alerta de “chubascos y tormentas fuertes o muy fuertes” para el martes 29 de octubre. El martes a las 7:36 horas de la mañana la AEMET lanza el primer aviso rojo en el interior norte de Valencia.
- Ante el aviso de la AEMET, la delegada del gobierno en Valencia, Pilar Bernabé, suspende un viaje previsto, y llama hasta tres veces a la consejera de Justicia y responsable política de Emergencias, Salomé Pradas: a las 12:00, a las 12:48 y a las 14:00. Hasta esa última llamada, la Generalitat no pide medios al gobierno, y cuando lo hace es de manera limitada: pidiendo a la UME sólo para el municipio de Utiel, tras una cuarta conversación telefónica.
- A las 12:00 Carlos Mazón comparece en el Palau de la Generalitat, donde lejos de tomar en consideración el aviso rojo -la alerta máxima- de la AEMET, quita importancia a la alarma, declarando que «se espera que sobre las 18.00 [la Dana] disminuya su intensidad en toda la Comunitat Valenciana».
- A las 13:45 mantiene una reunión con agentes sociales -patronal y sindicatos- para hablar de los presupuestos.
- A las 15:00 Carlos Mazón comienza una comida con la periodista Maribel Villaplana que acaba a las 18:00. Pese a que él afirma que «era una comida para hablar del futuro de la televisión» y que «estuvo informado», se ha demostrado que durante varias horas estuvo incomunicado.
- Justo a la hora de inicio de esa comida (15:00), es cuando la Generalitat sube el nivel de la alerta de nivel 1 a nivel 2, al desbordarse las aguas en Utiel, donde afortunadamente su alcalde Ricardo Gabaldón, del Partido Popular, fue previsor, alertó a la población y suspendió las clases, salvando muchas vidas.
- 16:57 horas. El 112 de la Comunitat Valenciana distribuye en redes sociales la situación en Utiel. El pueblo está inundado y aseguran haber recibido ya más de 500 llamadas de socorro.
- A las 17:00 comienza la reunión en el Centro de Coordinación Operativo Integrado (CECOPI). Pero Mazón no se incorpora a ella hasta las 19:00, donde al llegar tarde le tienen que explicar todo lo que ya se ha tratado.
- 17:35 horas. El CECOPI lanza la alerta hidrológica por el aumento del caudal del río Magro, que puede alcanzar (y alcanzó) los 1.000 metros cúbicos por segundo. Más del doble de lo que lleva el río Ebro cuando desemboca.
- 18:30 horas. Mazón acaba su comida con Vilaplana, según el dueño del restaurante. Según el entorno de la periodista, acabaron sobre las 17:30 o 17:40 horas. Para entonces, el barranco del Poyo se ha desbordado e inunda Torrent, Picanya, Paiporta, Benetússer, Sedaví, Massanassa y Catarroja.
- 18:43 horas. La Confederación Hidrográfica del Júcar avisa por correo electrónico a la Generalitat de que el agua baja por la rambla del Poyo a casi 1.700 metros por segundo. Once veces por encima del umbral 3 de emergencias. En ese momento, la alcaldesa de Paiporta hace un llamamiento en redes sociales a sus vecinos para que no salgan de casa y se dirijan a zonas altas.
- A las 19:00 la situación ya se había desbordado por completo. La alcaldesa de Paiporta llama a la delegada de Gobierno, Pilar Bernabé, que estaba en la reunión de emergencias, porque no localiza el teléfono de la consellera de Interior y Justicia, Salomé Pradas.
- 19:15 horas. Según el audio desvelado por la Cadena SER, un técnico plantea la posibilidad de lanzar un aviso a los móviles de todos los ciudadanos. En la reunión, a la que todavía no se ha incorporado Mazón, todo es caos.
- 19:30 horas. Llega Mazón a la reunión.
- A las 20:11 se activan los avisos por móvil, cuando miles de personas tienen el agua al cuello o están luchando por salvar sus vidas