Libertad intelectual

Copyleft: La literatura gratuita de La Red

Javier Celaya acaba de publicar su ensayo «La empresa Web 2.0», que comparte el formato en papel y el formato digital. La editorial Planeta publica su edición «tópica» en papel, pero el autor peleó para quedarse él con los derechos de distribución en Internet de forma gratuita, algo a lo que la editorial se negó en principio, pero tuvo que aceptar después de una seria negociación.

Los libros se ueden ojear en las librerías, y descubrir contenidos que nos pueden resultar interesantes para posteriormente adquirirlos. Esta es la base que sustenta el fenómeno de la difusión gratuita de obras escritas a través de La Red, una iniciativa que ya empieza a ser común en otros países y que desde el principio ha sido impulsada por los autores.Los principales “propagandistas” de esta práctica literaria son el colectivo literario italiano Wu Ming (“sin nombre” en chino). Cinco boloñeses que se dedican principalmente a la novela, que con su método han conseguido colocar dos de sus novelas impresas entre los “Best Sellers” de la última década. La totalidad de sus obras esta disponible de forma gratuita y en descarga directa desde su sitio www.wumingfoundation.com, la mayoría de ellas en italiano, español e inglés. Como ellos explican en su texto “El copyleft explicado a los niños”: Un usuario X se conecta a nuestro sitio y descarga, un libro nuestro. Le gusta de tal manera que decide regalarlo, y por supuesto no puede presentarse en la fiesta de cumpleaños con un tocho de folios. Por tanto, se encamina a la librería y lo compra. Una copia "pirateada" = una copia vendida. Hay quien ha descargado nuestro libro y, a continuación de leerlo, lo ha regalado seis o siete veces. Una copia "pirateada" = varias copias vendidas.” Con esta sencillez aclaran la rentabilidad que ofrece esta práctica de la descarga a particulares sin ánimo de lucro.El copyleft apareció con la creación del software libre, y se extiende rápidamente a otros ámbitos. Un acceso libre a la cultura escrita que poco a poco se implanta en nuestro país de forma imparable, justificado por el hecho de que la rentabilidad que los autores sacan de su obra intelectual no está reñida con su distribución gratuita masiva. Las grandes editoriales están obligadas pues a replantearse las estrategias de mercado a diseñar con los productos literarios.

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