El caso de Posada Carriles

Chávez ve señales de cambio en EE UU

A Posada Carriles se le seguirá un juicio por once cargos, debido a falsas declaraciones a la Justicia norteamericana sobre su participación en los atentados con bombas en Cuba y también respecto del intento de asesinato al lí­der cubano Fidel Castro en la Cumbre Iberoamericana de 2000 en Panamá.

El residente de Venezuela, Hugo Chávez, consideró buena la señal de Estados Unidos al abrir un juicio al activista anticastrista Luis Posada Carriles, inculpado el jueves por mentir sobre su rol en el atentado en La Habana, en 1997, informó ayer Telesur.»Están volviendo a llamar al terrorista éste (Luis Posada Carriles), parecieran buenas señales de Estados Unidos y del cambio que allí­ se está experimentando», declaró el mandatario venezolano en el avión que lo trasladó desde China hacia Cuba, tras su gira por Medio Oriente y Asia.Chávez habí­a instado en febrero al presidente estadounidense, Barack Obama, a que extraditara a Venezuela a Posada Carriles, quien se fugó de una cárcel en Caracas en 1985, mientras era procesado por la voladura de un avión comercial en el que viajaba un grupo de deportistas cubanos, entre otros, y que dejó 73 muertos. El presidente venezolano dijo en esa ocasión que Posada Carriles estaba «protegido» en Estados Unidos tras «los crí­menes que hizo en Venezuela».A Posada Carriles se le seguirá un juicio por once cargos, debido a falsas declaraciones a la Justicia norteamericana sobre su participación en los atentados con bombas en Cuba y también respecto del intento de asesinato al lí­der cubano Fidel Castro en la Cumbre Iberoamericana de 2000 en Panamá.Conforme con la decisión del juez, su juicio se iniciará el próximo 10 de agosto en El Paso (Texas) tras la selección de jurado prevista el mismo dí­a. Posada Carriles, de 81 años, un anticastrista de larga data y considerado el «terrorista más conocido del hemisferio» por Caracas y La Habana, fue detenido en 2005 en Texas por cargos migratorios y liberado en mayo de 2007. El militante anticastrista se convirtió en uno de los principales reclamos de Cuba y Venezuela.Chávez llegó a Cuba a la madrugada, acompañado por el canciller Nicolás Maduro, el ministro de Energí­a y Petróleo y presidente de Pdvsa, Rafael Ramí­rez, y otros ministros y funcionarios venezolanos. Este es el segundo viaje que realiza el presidente venezolano a Cuba este año, luego de estar en febrero pasado, cuando también se reunió con su «padre ideológico», Fidel Castro, y su hermano Raúl Castro, al mando de la isla desde que Fidel enfermó, hace casi tres años.El mandatario venezolano, durante su vuelo desde China hacia Cuba, ratificó que después de la Cumbre de las Américas irá a Argentina y Brasil, cumpliendo con las reuniones trimestrales previstas con sus homólogos de esos paí­ses. Además recordó que la semana próxima recibirá al presidente colombiano, Alvaro Uribe, antes de la reunión extraordinaria de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) prevista para el 16 de abril.»El caso de Posada Carriles, que le están abriendo un juicio en Estados Unidos, lo están volviendo a llamar, al terrorista éste. Estamos evaluando, parecieran buenas señales de parte de los Estados Unidos, de parte del cambio que, aparentemente, allí­ se está experimentando. Lo han llamado y le van a abrir un juicio por haber mentido, ahora eso lo saben ellos desde hace mucho tiempo que él está mintiendo».»En Estados Unidos hay cambios importantes, corrientes de cambios, se desmorona la lógica capitalista y los valores capitalistas porque están en crisis. Sudamérica toda en bloque con trasformaciones, África, el Oriente Medio, el mundo se está trasformando y nosotros somos uno de los factores conscientes que está jugando un partido sobre el tablero, pensado» afirmo Hugo Chávez.»Esta gira, por ejemplo, es como el que juega ajedrez. Una gira pensada. Doha y unos objetivos, Teherán y unos objetivos, Tokio y unos objetivos, metas y una agenda estratégica. Luego Pekí­n y ahora La Habana, todo está dentro de un mapa estratégico en movimiento».

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