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Esta vez no hay guerra de cifras, los mismos organizadores reconocen 30.000 personas en la manifestación convocada contra la crisis. ¿Cómo se puede explicar una asistencia tan escasa en la capital de España, convocada por las dos grandes centrales sindicales, con la que está cayendo? Evidentemente no se corresponde con el grado de indignación creciente entre los trabajadores ante la crisis. Pero sí con la estrategia de la dirección de los dos sindicatos mayoritarios.
Los secretarios generales de Comisiones, Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, aenas han juntado tras de sus pancartas a unos pocos miles de trabajadores madrileños, cuando hace apenas un mes las organizaciones de Castilla-La Mancha reunían en Albacete, Ciudad Real y Toledo (pequeñas ciudades de provincia) casi tantos manifestantes como ellos en la capital con casi 3,5 millones de habitantes.Encauzar para rebajar.Las manifestaciones que ya se han producido en diferentes partes de España (Castilla-La Mancha, Zaragoza, Barcelona…) ponen de manifiesto una indignación popular creciente y una respuesta en aumento. Pero las direcciones de CCOO y UGT, ya que no pueden parar las movilizaciones y las exigencias desde las bases, están siguiendo una estrategia de taponar y desactivar el movimiento.En situaciones de extrema gravedad para los trabajadores, como las reconversiones de Felipe González o el “decretazo” de Aznar, los sindicatos llamaron a la movilización general; pero ahora las direcciones sindicales que encabezan Méndez y Toxo, ante la situación más grave de toda la democracia, en vez de elegir el camino de la Huelga General, hablan de “escalada de movilizaciones”. Pero en los hechos no es sino una estrategia de desactivación en pequeñas manifestaciones para rebajar la indignación y las exigencias populares. Eso es lo que explica la escasa aplicación en la convocatoria de Madrid.Hay otro aspecto que descubre la posición que están manteniendo las dos cúpulas de los principales sindicatos, el lema; concentrado en “la protección social” como eje de las reivindicaciones. Hace unos días el secretario general de CCOO, Fernández Toxo, decía que: “No hay recursos disponibles en la caja del Estado para ampliar las prestaciones por desempleo”; y por eso proponía el endeudamiento del Estado. (O sea de todos durante varias generaciones.) Cuando el problema es que estos dirigentes sindicales no están dispuestos a tocar los privilegios de la oligarquía, los grandes monopolios y las multinacionales. Como venimos demostrando desde De Verdad Digital, sólo con algunas medidas básicas se liberarían miles de millones de euros –sin necesidad de recurrir al endeudamiento de varias generaciones de españoles (no se endeuda el Estado, nos endeudan a varias generaciones)- para crear riqueza y empleo; además de disponer de recursos para mejorar las prestaciones sociales.¡Claro que eso exige estar dispuesto a movilizar al conjunto de los trabajadores y el país en una Huelga General! Para exigir la reducción del 10-15% de los gastos del Estado, la rebaja a 10.000 euros de los sueldos millonarios de los altos Ejecutivos de la banca y monopolios, impuestos progresivos sobre los grandes beneficios, la retirada de los ERE o devolución de las ayudas a las multinacionales, etc.¿No hay de dónde sacar recursos o los burócratas sindicales no tienen voluntad para exigirlo?