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Budapest desafí­a a Bruselas

La Unión Europea continúa con su política de sanciones contra ciudadanos de Rusia y tiene previsto extender las medidas restrictivas a nuevos «responsables» de la crisis ucraniana el próximo 9 de febrero, escribe Rossiyskaya Gazeta.

No obstante, algunos líderes europeos siguen oponiéndose a la «guerra de sanciones» contra Moscú, entre ellos, el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán.

Orbán, quien hace poco celebró las conversaciones en Budapest con la canciller alemana, Angela Merkel, considera que «la tarea clave» consiste en entablar el diálogo a largo plazo con Moscú para acordar la solución política a la crisis ucraniana.

«Estoy convencido de que Europa, incluida Hungría, está interesada en que Rusia siga inyectando sus materias primas y recursos energéticos en la economía europea», dijo el jefe del Gobierno húngaro a la prensa alemana.

A juicio de los observadores, Merkel trató de persuadir a Orbán a respaldar la política paneuropea de sanciones contra Moscú.

Entretanto, el presidente ruso, Vladímir Putin, visitará Hungría el próximo 17 de febrero.

Entre los países europeos, Hungría es el tercer socio comercial de Rusia después de Alemania y Austria.

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