SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Bárcenas, desde dentro y fuera de España

Imposible escribir de otra cosa que no sea el caso Bárcenas que en términos políticos empieza ya a llamarse ,dentro y fuera de España, el caso Rajoy. Un caso que puede tener enormes consecuencias políticas y económicas.

Nos faltaba eso para debilitar todavía mas la confianza de los inversores y de nuestros socios europeos. La reforma energética costara caro al prestigio y a la seguridad jurídica que España ofrecía hasta ahora a los inversores extranjeros. Y el gobierno tendrá que enfrentarse a multitud de reclamaciones ante los tribunales. Nuestras perspectivas de crecimiento vuelven a ser cuestionadas por el FMI para el que la recuperación no llegara hasta el 2015. Nuestro endeudamiento publico ha superado la media de la UE y a finales de Mayo estaba ya prácticamente en el 90 % del PIB,15 puntos mas en un año ,un incremento solo superado por griegos y portugueses.Y después de las revelaciones de Bárcenas sobre la financiación irregular del PP y los pagos a sus dirigentes, con Rajoy, entonces ministro, incluido, nuestro prestigio político exterior anda por los suelos.

La lectura de la prensa europea es especialmente ilustrativa de esta crisis de la política tal como se percibe desde dentro y fuera de España. The Economist hace un repaso desde Bárcenas a la financiación ilegal de CiU a través del emblemáticoPalau de la Música pasando por los Eres en Andalucía para concluir que los españoles están hastiados de sus políticos y que esa conjunción de corrupción política con una doble recesión, caídas de sueldos, cortes en los servicios públicos y un paro por encima del 27 % es un coctel explosivo para la sociedad española

Cuando el rating de Italia acaba de ser de nuevo rebajado justo por encima del “bono basura” ,la inestabilidad política que se puede derivar del caso Bárcenas/Rajoy nos puede costar caro en términos de prima de riesgo. La amenaza de la oposición de presentar la moción de censura ha acabado con el tiempo en el que se podía jugar a Don Tancredo y a Rajoy le ha llegado el momento de las inevitables explicaciones parlamentarias. Es lamentable que esa amenaza haya sido la única forma de conseguir que Rajoy de explicaciones en las Cortes. Y como es de suponer que esas explicaciones se limitaran a negar todo lo que Bárcenas ha destapado ,me temo que las razones para presentar una moción de censura, es decir una falta de confianza y la exigencia de responsabilidades al menos políticas, seguirán siendo validas.

Cierto que Rajoy está parlamentariamente blindado por su mayoría absoluta y esta no se va a resquebrajar. Por eso la dimisión que se le reclama solo se produciría por un hipotético encausamiento judicial, por mucho que las evidencias del caso indignen a la opinión publica española. Pero la hipótesis de una crisis política en España y el desprestigio adicional que estos acontecimientos añaden a la imagen de los ‘países del Sur’ vistos desde una óptica centroeuropea no nos va a ayudar nada a salir de la crisis.

Jurídicamente, el PP podría confiar en que no haya pruebas validas ante un Tribunal, que las cantidades en juego no lleguen a delito fiscal, argumentar que vulnerar la Ley de incompatibilidades no es delito y que no hay correlación temporal entre los pagos de empresas constructoras y las concesiones de obras publicas. Pero lo que no pueden evitar es la condena de la opinión publica y el desencanto democrático que se producirá si esos hechos no se aclaran y se castigan. Solo las conversaciones entre Rajoy y Bárcenas en las que Rajoy le reconforta, le pide tranquilidad y ofrece apoyo al que públicamente se califica de delincuente, cuando ya se sabia la fortuna que tenia amasada en Suiza, bastaría en cualquier país con un mínimo de exigencia democrática para la dimisión fulminante del jefe del gobierno. Aquí las cosas son diferentes pero el PP no escapara a la sanción de la opinión publica, son legión las personas que le votaron y que ya no saben a quien votar porque, aunque decepcionados por el PP, no parecen dispuestos a dirigir su voto al PSOE .

Los hechos denunciados son de una extrema gravedad. Se parecen a la Tangentopolis italiana, cuando se descubrió la financiación de los partidos mediante el sistemático cobro de comisiones por la contratación de obra publica. Aquello acabó con un sistema político. Tiene razón la Sra. Aguirre, cualesquiera que sean sus motivaciones profundas al hacerlo, cuando dice que el PP debería actuar más rápido y con mayor exigencia que la propia justicia en vez de parapetarse frente a ella.Y lo mismo cabe decir de CiU que responde por boca del Sr Mas que si se acaba probando que recibió 5 millones de euros vía el Palau “será el primero en actuar”. ¿Pero es que no sabe si su partido recibió o no esas cantidades que no le pueden pasar desapercibidas? ¿Por qué, en vez de jugar al cerrojo frente a la justicia no encabezan la operación limpieza en su casa? Y desgraciadamente lo mismo le reprocha la juez Alaya a la Junta de Andalucía a la que considera que su papel como acusación particular más se parece a una actuación propia de la defensa de los encausados.

El lamentable caso de los Eres’s tampoco contribuye a enaltecer el funcionamiento de nuestras instituciones publicas ni al prestigio del partido socialista. Sorprende la imputación de Magdalena Álvarez pero también sorprende que no haya habido ninguna asunción de responsabilidad política por nadie de la Junta de Andalucía. Porque una cosa son las responsabilidades penales y otras las políticas. Y de estas ultimas, de las que no se ocupan los tribunales, alguna debe haber. Y en el caso de Rajoy ,la responsabilidad política de haber nombrado, mantenido, pagado, defendido a ultranza y reconfortado a un tesorero de su partido que ha amasado una fortuna mientras ejercía de tal no es precisamente pequeña.

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