El 1 de octubre volvió a subir la luz. Es la cuarta vez que ocurre en lo que va de año. Desde 2007, el precio de la luz ha subido casi un 70%, obligando a cada familia española a pagar 404 euros más al año a las eléctricas. Nada justifica una subida tan escandalosa. Tan solo la decisión de que la mayoría de la población «financiemos» los multimillonarios beneficios de las eléctricas. Y el gobierno ampara el robo, defendiendo a los ladrones y atacando a las víctimas.
La factura de la luz vuelve a subir el 1 de octubre un 3,1%. Es la cuarta subida en lo que va de año, tras la del 3% en enero, 1,2% en julio y del 3,2% en agosto.
Según un informe de FACUA-Consumidores en Acción, en abril de 2007, el usuario medio pagaba 48,59 euros al mes (impuestos incluidos) por el recibo de la luz. «Nos atracan en el recibo de la luz… Y encima tenemos que “subvencionar” a los ladrones»
En abril de 2007, el usuario medio pagaba 48,59 euros al mes (impuestos incluidos) por el recibo de la luz, según un informe de FACUA-Consumidores en Acción. Ahora pasará a pagar 82,29 euros, por lo que el incremento acumulado desde 2007 alcanzará el 69,35%.
Lo que supone una subida de 404,48 euros al año. Situando el recibo anual en 863 euros.
Hasta la propia Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, afirmó en el Senado que está «perpleja» ante la «constante» subida del precio de la luz.
La Asociación Nacional de Ahorro y Eficiencia Energética (Anae) ha puesto el dedo en la llaga al denunciar en un comunicado “la magia con la que, pese a la congelación de los peajes y la ligera bajada en el precio de la electricidad, se producen nuevas subidas” en el precio de la luz. Gracias a “un mecanismo oscuro y perverso, en el que se permiten «aberraciones difíciles de comprender para cualquier consumidor».
Ese “mecanismo oscuro y perverso” es el control monopolista de las eléctricas, que les permite imponer precios abusivos.
Lo que necesitamos es una ley antimonopolio que favorezca la competencia empresarial, elimine los abusos monopolistas y permita rebajar precios y tarifas de los servicios básicos, la luz pero también el gas, agua, gasolina, transportes…
Porque lo que está haciendo actualmente el gobierno es exactamente lo contrario, proteger la extorsión monopolista sobre la población.
La última reforma aprobada por el gobierno no solo permite una nueva subida de la luz, sino que también cargará sobre las cuentas públicas los 4.000 millones de euros que las eléctricas recibirán por el “déficit de tarifa”.
Gracias a su absoluto control monopolista sobre el mercado, las eléctricas pueden presentar unas “cuentas trucadas”, afirmando que los costes de producción de la electricidad son mayores que el precio impuesto por el Estado.
Todo el mundo sabe que esto es mentira. Pero la estafa obliga al erario público –es decir a todos nosotros- a financiar una inexistente deuda con las eléctricas que ya supera los 24.000 millones de euros.
Nos atracan en el recibo de la luz… Y encima tenemos que “subvencionar” a los ladrones.