Conversaciones con un primate

Atapuerca no tiene fin

Esclarecer el origen de la fabulosa acumulación de fósiles humanos de la Sima de los Huesos ha sido, a lo largo de tres décadas, uno de los mayores retos del equipo de investigación de Atapuerca . Durante este tiempo, se han barajado diversas hipótesis, defendidas por diferentes cientí­ficos, que se referí­an o bien a la acción de algún agente geológico, como coladas de barro o flujos de agua que habrian arrastrado los fósiles hasta el yacimiento desde otro lugar lejano o bien a la acción de animales carní­voros que habrí­an introducido los restos humanos en la cavidad. Sin embargo, para el grupo de excavadores de la Sima , la explicación mas plausible era una acumulación intencional de cadáveres por parte de otros humanos, en lo que constituirí­a el primer acto funerario de la historia de la humanidad. Una buena parte del trabajo de las excavaciones de estos años se ha centrado en la búsqueda de datos que permitiesen confirmar o refutar esa hipótesis. Los cientí­ficos han tardado cerca de 20 años en encontrar y reconstruir el cráneo nº 17 a partir de 52 fragmentos. El cráneo muestra las huellas inequí­vocas de un crimen. Las heridas mortales descubiertas en el Cráneo 17 son un caso único en la paleoantropologí­a forense y han permitido resolver uno de los mayores enigmas de la Prehistoria.

José María Bermúdez de Castro es doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad Complutense de Madrid y a lo largo de su trayectoria ha sido galardonado, entre otros premios, con el Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica (1997) y el Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades (1998). Es junto con Juan Luis Arsuaga y Eudald Carbonell, uno de los tres codirectores de las excavaciones de los yacimientos pleistocenos de la Sierra de Atapuerca. Considerado una auténtica institución científica en el estudio de la dentición de los homínidos, co-dirigió hace unos años el yacimiento de Pinilla del Valle (Madrid) y ha colaborado en los análisis de las excavaciones de los yacimientos musterienses de l’Abric Romaní (Barcelona) y Valdegoba (Burgos).

¿ Qué balance hacéis de las excavaciones?

Ha sido un año muy bueno. Hemos recuperado el ritmo y el tiempo que habíamos perdido durante la crisis. En los últimos tres años sólo habíamos podido excavar durante algo menos de un mes. Este año hemos aumentado la excavación a 40 días y se ha notado mucho en los resultados. No ha habido descubrimientos excepcionales, pero se ha realizado un gran trabajo. Este año solamente se han encontrado restos humanos en Europa en dos yacimientos , y uno de ellos ha sido el de la Sima de los Huesos de Atapuerca. Aunque esto sea ya habitual en estos yacimientos, no deja de ser un hecho excepcional.

Estamos contentos porque vemos muchos avances, que se traducirán en grandes hallazgos en los próximos años. Estamos cerca del nivel TD6 del yacimiento de la Gran Dolina donde esperamos encontrar numerosos restos humanos del Homo antecessor. Los primeros fósiles de TD6 se encontraron en 1994. En 1997 definimos la nueva especie y en el 2003 volvimos a encontrar nuevos restos en el mismo nivel. Por eso sabemos que están ahí, esperando a que excavemos todo el nivel TD6. Durante 21 años hemos excavado el nivel TD10, que es extraordinariamente rico y ha sido muy productivo desde el punto de vista arqueológico y paleontológico. Esta excavación nos impedía llegar a TD6, que está un metro y medio por debajo; pero TD10 ya se acaba. Le queda un año o dos y enseguida podremos alcanzar de nuevo el nivel TD6.

Este año también hemos sondeado la Cueva Fantasma, que supone un reto para el futuro. Los actuales responsables queremos dejar yacimientos nuevos explorados, como una especie de herencia para los que en el futuro trabajen en Atapuerca. Nuevas técnicas como la tomografía de resistividad eléctrica o el georádar nos han permitido encontrar nuevos yacimientos. Ya están localizados y hemos empezado a sondearlos. 2015 ha sido realmente un año muy productivo.

Atapuerca parece no tener fin.

Todo tiene un final, pero en el caso de Atapuerca se me antoja muy lejano en el tiempo. Otra cosa es que se realicen hallazgos tan importantes como los descubiertos hasta el momento. Yo particularmente creo que así será, porque todavía quedan muchos yacimientos por descubrir y por excavar.

Habéis reconstruido el cráneo nº 17. ¿ Qué tiene de excepcional respecto a otros hallazgos?

Se han reconstruido hasta ahora 17 cráneos procedentes del yacimiento de la Sima de los Huesos. El nº 17 es el único cuyo estudio permite inferir que el individuo al que perteneció este cráneo murió tras un ataque de otro humano. Se ve perfectamente como un mismo objeto impacta dos veces en la parte frontal izquierda del cráneo, perforándolo y dejando dos agujeros idénticos de un par de centímetros de diámetro. El propietario de este cráneo seguramente fue golpeado con un objeto que sujetaba su oponente con la mano derecha, porque los impactos se localizan en la parte izquierda del hueso frontal. Todos los indicios apuntan, por tanto, a violencia interpersonal dentro de un mismo grupo o entre grupos rivales.

La Sima de los Huesos es excepcional por el número de restos encontrados, hasta ahora cerca de 7.000 que componen un mínimo de 28 personas. Esto es un hecho extraordinario y la pregunta que nos hemos hecho siempre es: ¿por qué están ahí? Hemos encontrado centenares de fósiles de osos junto a los restos humanos. Esto es muy normal, porque los osos hibernan en las cueva y muchos mueren durante el invierno. Pero la Sima de los Huesos es un verdadero agujero en un rincón de de la Cueva Mayor, muy alejado de la entrada actual; un pozo de 14 metros de caída en vertical y otros 14 en rampa inclinada. En una cueva es posible encontrar restos humanos, pero en este pozo nadie hubiera esperado encontrar una acumulación de cadáveres de seres humanos de hace más de 400.000 años.

Para explicar esta acumulación hemos pensado en alguna hipótesis coherente. Buscamos mediante técnicas como el georádar una entrada diferente a la que conocemos hoy en día. Una entrada más próxima y asequible para llegar sin dificultad y sin luz a la Sima de los Huesos. Creemos que los cadáveres se depositaron en este pozo de manera intencionada, junto con la única pieza de industria lítica que hemos encontrado: “Excalibur”, una verdadera joya del Pleistoceno, un bifaz muy bonito con un color rojizo increíble, que puede verse en el Museo de la Evolución en Burgos. Pero, ¿por que murieron todos estos humanos en un tiempo tan corto? La edad de la mayor parte de los individuos oscila entre los diez y los 24 años. En cualquier cementerio lo normal es encontrar individuos fallecidos bien en edades muy tempranas o durante la vejez. Pero en la Sima de los Huesos la mayoría son individuos jóvenes, muertos durante su época reproductora. Este tipo de acumulación es sin duda de tipo catastrófico. En mi opinión, el caso de violencia que observamos en el cráneo nº 17 es solo la punta del iceberg, que viene a demostrar la acumulación de cadáveres de manera intencionada. La posibilidad de que la muerte de todos los individuos fuera violenta nunca se ha publicado y solo la hemos comentado entre nosotros. Faltan evidencias para llegar a una conclusión de tanto calado. «En Atapuerca hay muchos yacimientos por descubrir y excavar»

En cualquier caso, el ejemplo del cráneo 17 no es el ejemplo más antiguo de violencia entre grupos humanos del pasado. Los fósiles del nivel TD6 de Gran Dolina, que antes he mencionado, fueron también matados y comidos. Es el caso de canibalismo bien demostrado más antiguo de la historia de la humanidad.

¿Se confirma la hipótesis del origen funerario de la Sima de los huesos?

Es muy difícil de demostrar. Todo el equipo defendemos el origen funerario de la Sima desde el principio. Hemos descartado prácticamente todas las demás hipótesis: actuación de carnívoros, un accidente… Siempre hemos pensado en un evento funerario pero no sabíamos porqué. Podía haber sido un envenenamiento, una hambruna… Pero, como expliqué antes, llama la atención que muriesen los individuos más jóvenes del grupo. Para aquella época (y también para prácticamente toda la historia de la humanidad), los jóvenes que sobrevivían a las enfermedades de la niñez eran fuertes y dejaban descendientes. La selección natural actuaba de manera implacable. Por eso es extraño encontrar un grupo tan grande de jóvenes (hombres y mujeres) muertos en pleno período de fertilidad.

El comportamiento funerario implica un concepción del mundo. Los restos más antiguos de ritos funerarios son mucho más modernos. ¿Cambia eso la concepción que se tenía del Neandertal? ¿Cuales serían sus rasgos definitorios?

En 1998, cuando se encontró el bifaz Excalibur ya habíamos hablado sobre el tema entre nosotros. Y en el 2001, en un congreso celebrado en el Museo de Historia Natural en Nueva York, presentamos esta hipótesis. Nuestros colegas respondieron con un silencio elocuente. No daban crédito. Presentamos el bifaz junto con los restos humanos, como una posible evidencia de ritual funerario. Excalibur pudo ser dejado en la Sima de los Huesos de manera intencionada. Pero esta hipótesis nunca ha sido aceptada. Alguien tendrá que encontrar algún día un yacimiento similar y de antigüedad parecida, que contenga las mismas evidencias. Solo entonces la comunidad científica podrá aceptar nuestra hipótesis. «La hipótesis de un rito funerario en la sima de los huesos cambiaría de forma radical nuestra concepción de la mente de nuestros antepasados»

El yacimiento de la Sima de los Huesos se a datado en 430.000 años. Esa antigüedad es cuatro veces mayor que la de los primeros enterramientos conocidos de los neandertales y de los miembros de nuestra especie. Por eso, la hipótesis de un rito funerario en la Sima de los Huesos cambiaría de manera radical nuestra concepción de la mente de nuestros antepasados. Esto no significa que hace 400.000 años los humanos de entonces creyeran en un ser superior. Solo podemos recuperar sus huesos, pero no su cerebro ni su mente. Podemos inferir lo que podían pensar a través de los restos arqueológicos y de las evidencias de su comportamiento. Pero es muy complicado (sino imposible) averiguar que conceptos abstractos manejaban.

Quizá no podemos hablar todavía de religión como representación fantástica del mundo pero sí de los primeros mitos.

Efectivamente. En la Sima de los Huesos podemos inferir algo así como el origen del pensamiento moderno (si nuestra hipótesis es correcta). Nosotros hemos desarrollado un pensamiento simbólico muy complejo, pero eso no quiere decir que el simbolismo sea una característica exclusiva de los humanos actuales, ni que haya aparecido súbitamente como consecuencia de una mutación génica. Muchas de las características que creemos que son exclusivas de nuestra especie ya están presentes de manera incipiente en especies mucho más antiguas.

Se plantea un enigma no solo evolutivo sino también antropológico.

Los descubrimientos y hallazgos de Atarpueca han resuelto muchas preguntas pero sobre todo es interesante la reflexión sobre quienes somos. ¿Por qué nos hemos considerado siempre superiores? Esa palabra está desterrada de nuestro vocabulario científico. Es importante admirar el cráneo de Miguelón, otro de los cráneos de la Sima de los Huesos y también expuesto en el Museo de la Evolución Humana de Burgos. Pero la mejor lección es reflexionar sobre nosotros mismos a la vista de los fósiles humanos y de los que podemos aprender de ellos.

¿Se ha encontrado ADN nuclear en los fósiles de la Sima de los Huesos?

Bueno, se está trabajando en este objetivo en el Instituto Max Planck, bajo la supervisión del conocido genetista Svante Pääbo. Nuestro colega ha sido entrevistado en muchas ocasiones y ha presumido de que se está consiguiendo. Puede que tarde todavía un tiempo pero Svante y su equipo acabará encontrándolo, porque es factible. Así que tengo muchas esperanzas de que se consiga. Como dije antes, los restos de la Sima de los Huesos se han encontrado en un lugar recóndito de la Cueva Mayor, enterrados en una arcilla muy fina en un pozo a 50 metros de profundidad desde la superficie. De ahí su excelente conservación. En fin, si se consigue descifrar el ADN nuclear de estos fósiles será un hito en el estudio de la evolución humana de Eurasia.

El análisis del ADN mitocondrial conectó inesperadamente a los Neandertales con los Denisovanos, dos especies muy alejadas en el tiempo y el espacio. Vuestra hipótesis señalaba por el contrario al Homo antecessor

Estoy convencido de que cuando se encuentre ADN nuclear las conclusiones serán diferentes. Los Denisovanos se corresponden a restos humanos encontrados en una cueva de Siberia. Yo creo que faltan muchas muestras de comparación. Cuando en una comparación introduces más y más datos variables los resultados cambian. Creo que falta información.

En cuanto a la posibilidad de encontrar ADN en los huesos del Homo antecessor lo veo casi una utopía. Los huesos de esta especie de Gran Dolina tienen una antigüedad de unos 850.000 años, están muy fosilizados y en peores condiciones que los restos encontrados en la Sima de los Huesos. Así que habrá que conformarse con el estudio morfológico de los huesos del Homo antecessor, que nos está dando mucha información y podrá utilizarse como referencia cuando se encuentre el ADN en los restos de la Sima de los Huesos

¿No demuestra Atapuerca que el puzzle de la evolución es mucho mas complejo que la concepción lineal que hemos estudiado todos de la Prehistoria?

En treinta años todas las concepciones han cambiado. Ahora aparecen nuevos restos, se estudia el ADN y el registro fósil se ha enriquecido.

Algunos hallazgos son muy llamativos. Por ejemplo, el Cráneo de Ceprano en Italia es rarísimo. La datación de este cráneo ha resultado muy difícil. Se ha estimado una antigüedad de 400.000 años para este fósil, pero no se parece en nada a los cráneos de la Sima de los Huesos.

Las piezas del pluzzle del registro fósil de Europa no encajan. Tratamos de buscar hipótesis que expliquen porque aparecen especímenes tan diversos en el mismo periodo. El problema es como se interpreta el registro fósil. Si se lee como una secuencia lineal las cosas no funcionan. Hay que pensar de otra manera, sabiendo que el hemisferio norte sufrió cambios climáticos considerables, la geografía producía barrera infranqueables y el tiempo ha sido mucho. Todo ello ha propiciado aislamientos prolongados de grupos humanos, que se han diferenciado de manera increíble. La diversidad del Plesitoceno solo es posible entenderla desde una perspectiva que ya hemos perdido en el siglo XXI. La evolución humana no ha sido lineal, sino que más bien se parecería a un arbusto complejo de ramas entrecruzadas. Todo muy complicado de entender.

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