La Ley de Dependencia

algo mas que una «ayuda económica»

Un reciente estudio presentado por la Sociedad Española de Geriatrí­a y Gerontologí­a refleja que el 25% de las personas mayores que sufren algún tipo de dependencia, y que están cuidados por su entorno familiar, sufren maltrato. Esta situación esta asociada a diferentes factores de riesgos, pero fija como causas principales aquellas situaciones de mayor dependencia de la persona cuidada y a condiciones de escasos recursos económicos, lo que puede agravarse con la recesión que vive ahora nuestro paí­s.

Otros elementos que contribuyen a que aarezca el maltrato son el estrés y el cansancio del cuidador, el hecho de que vivan juntos las 24 horas de día y tengan un entorno social y familiar reducido, lo que dificulta que se relacionen con otras personas y que la persona cuidada tenga una enfermedad crónica o con alteraciones cognitivas, lo que genera una sensación de cansancio y agotamiento sin ningún tipo de contrapartida por parte del cuidador.El perfil tipo de un maltratador es el de una persona que ha dedicado una media superior a los diez años de vida al cuidado de otra persona, convive con ella en malas condiciones económicas o en paro y presenta algún tipo de trastorno de personalidad, bien porque sufra algún tipo de neurosis o porque ese trastorno esté relacionado con el consumo de alcohol o drogas.El informe aporta datos como por ejemplo que el 16,4% de los mayores sufren faltas por negligencia, el 7,7% por abandono, el abuso psicológico se produce en un 3,1% de los casos, la explotación financiera, en el 1,5%, el abuso físico en un 1% y el sexual, en un 0,2%. Y la persona maltratada es una mujer mayor de 75 años, con dificultades de movilidad y comunicación, deterioro cognitivo, incontinencia, personalidad neurótica, con un ambiente de conflicto intergeneracional y de aislamiento social.En estos momentos, en España, según la SEGG , el 83% de los cuidadores son mujeres. Entre ellas, el 43% son hijas de la persona cuidada, un 22% son esposas y un 7,5% son nueras. En el 80% no existe una ocupación laboral remunerada del cuidador y un 85% prestan la ayuda a diario. El 17% comparten la labor de cuidar a una persona mayor con otras tareas domésticas como el cuidado de los hijos. Casi dos tercios de los cuidadores, el 60% comparten domicilio con la persona cuidada y el mismo porcentaje no recibe ayuda de otras persona. La edad media de las cuidadoras de 52%, el 20% superan los 65 años y el 77% están casadas.

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