Durante los años ochenta «Washington desarrolla un proyecto, para lo cual refuerza los lazos con la Democracia Cristiana», como alternativa para enfrentar a las fuerzas progresistas e insurreccionales en Centroamérica, principalmente en Guatemala, El Salvador y Nicaragua.
El residente de Colombia, Alvaro Uribe, recibió el apoyo expreso del canciller Alemán Angela Merkel a su política de seguridad democráticaMerkel, además, reiteró su disposición a impulsar las negociaciones para un tratado de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y los países la Comunidad Andina de Naciones, si es preciso permitiendo que se den distintas velocidades para llegar primero a un acuerdo con Perú y Colombia.Además, los dos gobernantes se mostraron optimistas por terminar pronto las negociaciones que deben llevar a la firma de un acuerdo sobre protección de inversiones y otro sobre doble tributación.Merkel recibió a Uribe en la cancillería durante una visita de un día del presidente a la capital alemana durante la que se entrevistó con empresarios, dos ministros, algunos diputados y representantes de la Fundación Konrad Adenauer.La FKA nació en 1956 como instrumento de la guerra fría, bajo el impulso de la Central de Inteligencia estadounidense, CIA, y financiada por el gobierno de Alemania Federal. Según el ex oficial de la Agencia de espionaje, Philip Agee, «por intermedio de ella, y durante muchos años, la CIA canalizó fondos hacia instituciones académicas e intelectuales.Desde los años ochenta, junto a la Fundación Friedrich Ebert -ligada a los socialdemócratas- tuvieron programas activos en unos sesenta países, y operaban en un secreto casi total.»Como parte integrante del Partido Demócrata Cristiano, la Fundación desembarcó en América Latina a principios de la de la década de los 70, con la tarea de ayudar a aislar la revolución cubana.En Chile, según numerosos documentos desclasificados estadounidenses, todos los instrumentos de la Democracia Cristiana pasaron de apoyar la candidatura de Salvador Allende a ser parte de la campaña que terminó en el derrocamiento del ya presidente por parte del general Augusto Pinochet.Los mismos documentos demuestran que fueron de los que recibieron dinero de la CIA para ello. Cuando se va el dictador, los principales dirigentes chilenos de la Democracia Cristiana actuaron directamente desde el gobierno para mantener el alineamiento de Chile con EE UU entre ellos Eduardo Frei y Patricio Aylwin, ex presidentes de ese país.Durante los años ochenta «Washington desarrolla un proyecto, para lo cual refuerza los lazos con la Democracia Cristiana», como alternativa para enfrentar a las fuerzas progresistas e insurreccionales en Centroamérica, principalmente en Guatemala, El Salvador y Nicaragua.Además de la fundación Konrad-Adenauer, próxima al CDU, participa activamente la fundación Friedrich-Ebert, cercana al SPD.El Partido de la Unión Cristiano-Social de Alemania (CSU) está representado en Latinoamérica y el Caribe por la fundación Hanns-Seidel .El Partido Demócrata Liberal de Alemania (FDP) por la fundación Friedrich-Naumann. En la descripción que dan de sí mismos, todos declaran que el apoyo a la democracia y al Estado de derecho es la base de su compromiso político al sur de los Estados Unidos de América, pero mirándolo de cerca se observa otro cuadro.El cuadro que ha tejido El imperialismo através de Fundaciones y Organizaciones no Gubernamentales no solo alemanas, sino españolas y de todos los países y partidos prohegemonista europeos. El ejemplo lo tenemos en la fundación Progreso Global que preside Felipe González.