10 de marzo

6 millones de razones y un referéndum por las Pensiones

Una nueva demostración de respuesta popular ante los recortes del gobierno. Un paso más en lo que ha de convertirse en una respuesta unitaria.

El pasado domingo salieron a la calle cientos de miles de ciudadanos en más de 50 capitales españolas, convocados por los sindicatos y la Cumbre Social, que reúne a más de 200 organizaciones, y coincidiendo con la convocatoria de la Confederación Europea de Sindicatos.

Y una vez más los bloques rojos de Unificación Comunista de España acudieron a las manifestaciones, colocando en primer lugar la unidad, por delante de cualquier otra cosa. Tal y como la organización viene defendiendo desde el 2008, es necesario un Frente Amplio de Unidad que a nivel político, sindical y social, permita concentrar los intereses del 90% de la población que sufre el saqueo de la Troika, bajo los recortes de Rajoy.

Enormes carteles con la consigna “Las Pensiones a la Constitución. ¡Referéndum Ya!” sembraron las manifestaciones en toda España, reclamando l atención incluso de los principales medios. Ya nadie puede creer que hay otro objetivo fundamental para la Troika que hacerse con el botín de las pensiones e hipotecar el futuro de nuestra gente por generaciones. «Cuanto más tarda en producirse la respuesta unitaria, más lo exige la gente»

Una de las consignas que más se cantaban “Que no, que no, no pagamos vuestra deuda con salud y educación”, “Que sí, que sí, que Rajoy y Rubalcaba son lacayos de Berlín”, pronto se verá transformada, pues el ataque que la Troika, con la complicidad del gobierno, prepara contra las pensiones ha de recibir la respuesta más contundente por parte del 90% de la población.

Pese a los múltiples intentos de dividir la respuesta, creando enfrentamientos, introduciendo violencia en las manifestaciones, sembrando la división y la diferencia por delante de la unidad, cada paso, cada manifestación se fortalece la unidad. Así lo pudimos ver con el apoyo del 15-M a la manifestación, aún en el último momento. Más teniendo en cuenta que cuanto más tarda en producirse la respuesta unitaria, más lo exige la gente, en la calle, en las asambleas, en las sedes y en las redes sociales.

Por eso, cada manifestación ha de convertirse en una oportunidad para limar las diferencias, establecer puntos de encuentro y de debate, y crear las condiciones para que cada vez más la defensa de nuestras condiciones de vida, especialmente de las pensiones, sea con una sola voz.

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