Record histórico de desahucios

250.000 familias a la puta calle

15.491 familias han sido expulsadas de sus viviendas, un 36,9% más que en el mismo trimestre del año pasado. Son las cifras oficiales; la realidad es mucho más dramática, organizaciones ciudadanas y expertos calculan que las familias expulsadas son más del doble. En los últimos tres años 250.000 familias han tenido que abandonar su casa por los embargos de los bancos al no poder hacer frente al pago de la hipoteca.

Según el informe del CGPJ “La Justicia dato a dato”, con el 36,9% de aumento los desahucios de viviendas se han trilicado en los últimos tres años. Si al comienzo de la crisis, en el primer trimestre de 2008 no se superaban los 5.000 desahucios, ahora son más de 15.000; en apenas tres años se han multiplicado por tres. La realidad mucho más ­dramática que las cifras ­oficiales Pero si las cifras oficiales son duras de por sí, la realidad es mucho más dramática. La duración de la crisis, que se prolonga ya casi cuatro años sumiendo en el paro a cinco millones de trabajadores; y la voracidad de la banca, cada vez más agresiva con doce meses seguidos ya subiendo el euribor y las hipotecas, están llevando al embargo a miles de familias que no pueden pagar sus hipotecas.Paro y morosidad van de la mano, sobre todo para ese millón y medio de hogares con todos sus miembros en paro, o esas 500.000 familias sin ingresos. La realidad, según los abogados de la Plataforma de Afectados Por la Hipoteca, es que “miles de familias, al verse en un callejón sin salida se autodesahucian. No hay orden judicial de lanzamiento pero sí desalojo real que no reflejan las cifras oficiales de la Justicia”.Así en 2010 se registraron 93.000 desalojos de viviendas, cuando las cifras oficiales reflejaron 48.000.Se calcula que hay un millón de expedientes de desahucio en curso y que en los últimos tres años 250.000 familias han tenido que abandonar sus casas. Es decir, podemos estar hablando de que un millón de personas empujadas a la exclusión social, que se han visto obligadas a realojarse hacinadas en viviendas de otros familiares, generalmente los padres, o directamente a buscarse la vida en la “puta calle”. ¿Quién es el ­responsable? Desde el Fondo Monetario Internacional, la Unión Europea y el Banco Central Europeo, junto con la clase política pretenden hacernos creer que los ciudadanos somos los responsables de esta situación por “vivir por encima de nuestras posibilidades”, que los culpables son los trabajadores que se atrevieron a comprarse un piso cuando tenían trabajo y un sueldo precario. Cuando los auténticos responsables de la “burbuja inmobiliaria” han sido los bancos y las grandes constructoras e inmobiliarias a las que aquellos dieron carta blanca en créditos y que ahora son los grandes morosos y deudores.Todo ello con la complicidad de la clase política que, sobre todo desde las autonomías y alcaldías, participó en la multiplicación y el reparto de los pelotazos inmobiliarios. Su morosidad es del 17,8% frente al 2,6% de las familias. Ellos deben oficialmente más de 82.000 millones de euros, frente a los 14.400 de las hipotecas de los ciudadanos corrientes. ¿Y tenemos que pagar nosotros? Y como decían en El País del pasado domingo los abogados y economistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Rafael Mayoral y Chema Ruíz: “El origen del problema responde a una estrategia calculada de las entidades financieras, que concedieron hipotecas a clientes de sectores vulnerables, con bajos recursos sabiendo que estos no iban a poder pagar…, porque así funcionan las cosas con las hipotecas basura: cuantas más hipotecas firman y cuanto más elevada es la tasación mayores son los paquetes de deuda titulizada que pueden colocar en los mercados y mayor el capital que captan”. Sí, se puede Al ritmo actual, al final de año los embargos de viviendas pueden llegar a superar los 120.000 desahucios reales. Es lo que se deduce de las previsiones de la PAH. Ni PSOE ni PP están dispuestos a soluciones que toquen los intereses de los clanes oligárquicos financieros, no hacen nada para evitar la escalada de los intereses de las hipotecas y se niegan a aplicar medidas como la dación del piso para cancelar la deuda con los bancos. Sin embargo, en la sociedad se extiende cada vez más la exigencia de medidas concretas como las que venimos proponiendo desde “De Verdad contra la crisis”: -Obligar a la banca a bajar los tipos de interés a las hipotecas. -Moratoria en el pago de la hipoteca y los embargos para las familias afectadas por el paro. -En casos extremos, que la dación del piso sea suficiente para cancelar el cien por cien de la deuda hipotecaria. -Plan de ayudas de todas las administraciones, estatal, autonómica y municipal, para realojar y poner con alquileres populares los miles de viviendas vacías que tienen los bancos y las grandes inmobiliarias.

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