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El sistema tributario recauda poco porque las rentas del capital tributan poco y por la evasión fiscal. Según el estudio, elaborado a partir de los datos de 2011, el grueso de la recaudación proviene de las rentas del trabajo y del consumo de los ciudadanos y no de las rentas del capital ni de los beneficios empresariales. Así en 2011, mientras los ciudadanos aportamos al Estado 139.737 millones de euros (el 90,76% del total), las empresas aportaron 14.529 millones (el 9,24%), y de ellas bancos, grandes empresas y fortunas sólo el 1,98%. Es decir, familias y pymes aportamos a las arcas de Hacienda el 98,02%, mientras los mayores poseedores de la riqueza y los beneficios del país, bancos, monopolios y fortunas no llegan ni al 2%.
Para la responsable de Investigaciones, Teresa Cavero, y el presidente de Gestha, Carlos Cruzado, eso es gracias a los privilegios fiscales que han reducido un 64% la recaudación por Impuesto de Sociedades (las empresas están pagando sólo un 3,5% de sus beneficios, frente al 30% que deberían pagar) y al fraude fiscal (el 72% de la evasión fiscal procede de las grandes empresas, pero la Agencia tributaria sólo dedica el 20% de sus recursos a investigarlo y perseguirlo en estos niveles, y el 80% se va a controlar a los ciudadanos de a pié.«El grueso de la recaudación proviene de las rentas del trabajo y del consumo de los ciudadanos y no de las rentas del capital ni de los beneficios empresariales»
¡No es que el sistema fiscal español recaude poco, es que los ricos apenas pagan!
Intermón-Oxfam exige una reforma fiscal que permita financiar las políticas sociales, más equitativa para recaudar más sobre la base de “un mayor esfuerzo fiscal de los más ricos y las grandes empresas”, de garantizar la progresividad para que “se tribute en función de la capacidad y la actividad económica” y de “poner coto al fraude fiscal”.
Redistribución fiscal
La reforma fiscal que exige Intermón-Oxfam está en la línea de las medidas que desde De Verdad contra la Crisis venimos proponiendo desde las elecciones de 2009 y que se van abriendo paso. Una Reforma Fiscal Integral y Progresiva como parte sustancial de un programa de Redistribución de la Riqueza, tal y como recoge el programa de Recortes Cero. Una Reforma para que paguen más los que más tienen y más ganan.«Una Reforma Fiscal que no sólo acabe con los recortes, sino que libere recursos para potenciar la inversión productiva, luchar contra el paro, reactivar la economía»
Una Reforma Fiscal que no sólo permita acabar con los recortes y aumentar la inversión pública en necesidades sociales como la Educación, la Sanidad, las Pensiones o la Dependencia, sino que libere recursos para destinar a potenciar la inversión productiva, luchar contra el paro, reactivar el consumo y la demanda interna.
Con medidas tales como: la eliminación de los privilegios fiscales de la banca, los monopolios y las grandes fortunas, para que paguen un Impuesto de Sociedades del 50% sobre sus enormes beneficios; o el aumento del IRF hasta el 75% para las rentas superiores a 500.000 euros anuales.