Cargando...Les quitan su consultorio médico y se lo llevan a la zona de las nuevas urbanizaciones.
Ayer decenas de vecinos de la edanía murciana de Javalí Viejo se manifestaron frente a la Consejería de Sanidad por su centro de salud. Los vecinos se quejan porque tras prometérselo en 2006 y entrar en los presupuestos del 2007, ahora la Consejería ha renunciado al proyecto. Javalí Viejo es un pedanía cercana a la Ñora. La Ñora es donde se instaló la Universidad Católica San Antonio (UCAM) y donde han proliferado numerosas urbanizaciones. Para dar servicio medico a estas nuevas urbanizaciones, la Consejería decidió trasladar el centro médico de Javalí Viejo a las cercanías de la urbanización de La Noria. A cambio la promesa fue abrir otro consultorio en Javalí. Tres años después, si te he visto no me acuerdo. Los vecinos denuncian que esto les obligará a transportarse varios kilómetros para visitar al medico y algunos vecinos mayores solo podrán ir cuando sus familiares tengan tiempo para llevarles en coche. Los vecinos, que fueron acompañados por el Pedáneo, sospechan que puede ser por el recorte de presupuestos en Sanidad. Como alternativa proponen utilizar los Fondos de Inversión Local. Proponen renunciar al carril bici. Un caso auténticamente kafkiano, es decir tenemos que pagar un carril bici en una pedanía en medio de la huerta, mientras no hay un centro de salud para la gente. Hacer un carril bici en la huerta es tan urgente como hacer una piscina en la orilla de la playa. La periferia huertana de Murcia es un enorme entresijo de caminos, sendas y carreteras secundarias donde los ciclistas siempre se han movido de forma segura y cómoda. Pero se ve que eso es más urgente que 2500 vecinos tengan el consultorio en su barrio. La huerta es, quizás, el lugar donde más gente mayor viva y por lo tanto donde más gente con dificultades para transportarse hay. Eso sí, primero se llevan el centro de salud a las macro-urbanizaciones. Evidentemente siempre vende más una urbanización con un centro médico al lado que si está en otro pueblo. Y luego, a los vecinos les dejan solo con la promesa y que se vayan al consultorio de las urbanizaciones. Es una cuestión increíble el cómo se llega a favorecer de una u otra forma tal urbanización o tal centro comercial en prejuicio de los vecinos o los barrios obreros.