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Apoyamos al gobierno de Pedro Sánchez cuando defiende la política de los dos Estados para Palestina. Y lo apoyamos cuando critica y denuncia la ruptura del alto el fuego en Gaza. Como hemos apoyado, con matices, el envío de armas a Ucrania para defender la independencia frente a la invasión rusa. Apoyamos todas las iniciativas del gobierno de progreso y las fuerzas que lo integran en las que se han distanciado de la política de Israel y de Estados Unidos con respecto a Gaza.
Comprendemos la autonomía que hay entre empresas de armamento y gobierno, que no se deben identificar.
Pero el gobierno no debería aceptar ni admitir, sino frenar y dificultar la venta de armas a Israel en tiempo de guerra.
Las noticias publicadas en varios medios indican que España sigue vendiendo armas a Israel. El diario El País decía este 22 de marzo que “España vendió armamento a Israel por valor de casi 50 millones de euros en 18 meses (entre enero de 2023 y junio de 2024)”. Añadiendo que el “material exportado era ‘no letal’ según la Secretaría de Estado de Comercio”. Pero como matizan otros medios sería “material de doble uso”. El digital, elsaltodiario.com, denunciaba el 20 de marzo que “en enero de este 2025, España exportó partes y accesorios de artillería y lanzacohetes a Israel”.
Esta venta de armas es totalmente inaceptable. España no debe hacer ningún tipo de contribuciones al genocida gobierno de Netanyahu y se debe hacer un embargo total al envío de armas a Israel.
Apoyamos las exigencias e iniciativas de los movimientos, fuerzas políticas, manifiestos… que reclaman al gobierno un embargo integral de armas y del tránsito de armamento y combustible militar dirigido a Israel, através de nuestros puertos o aeropuertos.