Irá precedida los próximos miércoles y jueves de concentraciones en todas las ciudades españolas. Ambas convocatorias pretenden crear un «movimiento unitario y amplio de rechazo» a una iniciativa que, según destacan, consagra en la Constitución «los principios más neoliberales y conservadores de la economía» y dejará «amarrado para el futuro el recorte del Estado del Bienestar».
El número dos de UGT, Toni Ferrer, auntó que la ciudadanía no puede ser «ajena» a una decisión que va a «hipotecar su futuro». Pese a la urgencia de la medida, los sindicatos y las organizaciones sociales la situaron en un contexto de amplio recorrido. Constituye, dijo Ferrer, el «paso más exagerado del giro» que el Gobierno dio a partir de mayo de 2010 en su política económica. Ninguno de los convocantes habló ayer de huelga general, aunque el Sindicato de Estudiantes, uno de ellos, la reclamó después en un comunicado. Sí dejaron claro que el Gobierno está abonando «el conflicto social» con sus políticas económicas, alertó Górriz. (EL MUNDO) EL CONFIDENCIAL.- Cualquier proceso de desapalancamiento se puede resolver, de manera ordenada, a través del crecimiento económico; de modo menos ortodoxo, vía la monetización de deuda y la inflación; haciendo sangre, a través de los planes de austeridad. Los datos y declaraciones conocidos en los últimos 30 días han puesto de manifiesto que, a día de hoy, solo parece posible esta última alternativa a la que se aferran sin pensar gobernantes de medio mundo. El pánico estival, atemperado en las últimas sesiones bursátiles, ha sido consecuencia de descontar el mercado sobre las empresas los efectos de su aplicación.El otoño viene calentito. CINCO DÍAS.- Luis del Rivero y los suyos han dado con los nudillos en la mesa de Antonio Brufau. Al sindicar sus acciones con Pemex, hasta alcanzar el 29,8% del capital, demandan un giro estratégico que incluya mensajes claros al mercado para conquistar la deseada revalorización en Bolsa. Hoy la acción de Repsol vale 18,89 euros, por los 26,7 euros que pagó Sacyr a finales de 2006. El presidente de Sacyr no querrá más sorpresas respecto a la política de remuneración de Repsol. Tuvo suficiente cuando en febrero de 2010 Brufau sacó adelante un recorte del 19% y se puso en entredicho la capacidad de la constructora para afrontar los intereses que cobra el consorcio que lideran Santander, Caja Madrid, Calyon y Citi. Movilizaciones. El Mundo Tres días de protesta contra el déficit cero B. P. R. Los sindicatos UGT, CCOO, USO y una docena de organizaciones sociales han convocado una manifestación en Madrid el día 6 de septiembre contra la reforma constitucional promovida por el Gobierno y el PP, que irá precedida los próximos miércoles y jueves de concentraciones en todas las ciudades españolas. Ambas convocatorias pretenden crear un «movimiento unitario y amplio de rechazo» a una iniciativa que, según destacan, consagra en la Constitución «los principios más neoliberales y conservadores de la economía» y dejará «amarrado para el futuro el recorte del Estado del Bienestar». Los organizadores -desde el Consejo de la Juventud hasta la Coordinadora de ONG para el Desarrollo- instan a los diputados y senadores, como «representantes de la soberanía popular», a votar en contra de la propuesta de introducir en la Carta Magna un límite al déficit público. Porque no escuchar el «clamor» de la ciudadanía «agrandará la brecha» entre la sociedad y quienes toman unas decisiones «con poco bagaje democrático». Más aún, advirtieron, en plena precampaña electoral. UGT y CCOO se reunieron también ayer con IU, que ha expresado su apoyo a las movilizaciones de los próximos días. «Cuando las plazas de ciudades y pueblos piden más democracia», se lamentó su coordinador federal, Cayo Lara, «ahora se vuelve a coartar este concepto, al sacar por la puerta de atrás del Parlamento una reforma de este calado». Si, pese a sus llamamientos, la iniciativa resulta aprobada, las organizaciones convocantes exigen que se ratifique en un referéndum. Los motivos del rechazo son tanto de fondo como de forma. Según explican, constitucionalizar el déficit cero no es más que «una opción ideológica y política», que descalifican como «errónea e inútil» y de «carácter marcadamente conservador». De ahí que «rompa el consenso sobre el que se basó la elaboración de la Carta Magna». En su origen sitúan los ataques de los especuladores financieros. Además, advierten de que supondrá «el deterioro del tejido económico y social» y limitará la capacidad de autogobierno de las administraciones públicas. Las críticas también cayeron ayer sobre el procedimiento, «inaceptable», con que se pretende aprobar la reforma constitucional: «Con la legislatura agotada, en periodo de vacaciones y sin debate; con nocturnidad y alevosía», describió el secretario de Acción Sindical de CCOO, Ramón Górriz. «¿Para qué sirven las elecciones políticas si luego no se tiene en cuenta la opinión de los ciudadanos?», se preguntó. El número dos de UGT, Toni Ferrer, apuntó que la ciudadanía no puede ser «ajena» a una decisión que va a «hipotecar su futuro». Pese a la urgencia de la medida, los sindicatos y las organizaciones sociales la situaron en un contexto de amplio recorrido. Constituye, dijo Ferrer, el «paso más exagerado del giro» que el Gobierno dio a partir de mayo de 2010 en su política económica. Ninguno de los convocantes habló ayer de huelga general, aunque el Sindicato de Estudiantes, uno de ellos, la reclamó después en un comunicado. Sí dejaron claro que el Gobierno está abonando «el conflicto social» con sus políticas económicas, alertó Górriz. Unas políticas que se han demostrado «un fracaso», resaltó, a la luz de las cifras del paro. Las malas previsiones para agosto, adelantadas ayer por el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, sirvieron a los sindicatos para reforzar su rechazo a la limitación del déficit público. «Se está ratificando que, sin estímulos al crecimiento, se alejan las posibilidades de recuperación», explicó Ferrer. Así que UGT y CCOO recomiendan al Gobierno que coloque la creación de empleo en el eje central de su política económica. Pero también le exigen «un pacto de rentas», que vaya más allá de la moderación salarial e incluya una reforma fiscal y garantice los salarios de los funcionarios y las pensiones, además de un comportamiento «responsable» de los empresarios conteniendo los precios y sus beneficios EL MUNDO. 30-8-2011 Opinión. El Confidencial Claves financieras para entender el convulso otoño que se avecina S. McCoy La crisis actual es de endeudamiento y no se va a resolver hasta que los distintos agentes económicos -particulares, entidades financieras y gobiernos- reduzcan el peso de la financiación ajena en sus balances, superior de forma agregada en Alemania, USA, Reino Unido o España al 250% de su PIB. No habría que recordar lo que acabo de escribir si no fuera porque esta perogrullada es precisamente la que está detrás de buena parte del convulso mes de agosto que acabamos de vivir. Cualquier proceso de desapalancamiento se puede resolver, de manera ordenada, a través del crecimiento económico; de modo menos ortodoxo, vía la monetización de deuda y la inflación; haciendo sangre, a través de los planes de austeridad. Los datos y declaraciones conocidos en los últimos 30 días han puesto de manifiesto que, a día de hoy, solo parece posible esta última alternativa a la que se aferran sin pensar gobernantes de medio mundo. El pánico estival, atemperado en las últimas sesiones bursátiles, ha sido consecuencia de descontar el mercado sobre las empresas los efectos de su aplicación.El otoño viene calentito. No se crece… En efecto. Se han multiplicado en fechas recientes las rebajas de las perspectivas de crecimiento de la economía mundial. Ayer mismo se apuntó a la moda el FMI. El catalizador habría que encontrarlo en el importante recorte que la oficina estadística de Estados Unidos aplicó a la evolución de su PIB, en una revisión que se extendió hasta 2008 y que pone de manifiesto que la recesión en aquel país ha sido sustancialmente más profunda de lo que inicialmente se pensaba y que, por tanto, las políticas fiscales adoptadas entonces no se ajustaban a una realidad peor que la estimada. El presente no es mejor y la debilidad se extiende a buena parte de las naciones de la OCDE, incapaces de crecer más de un 0,2% en el segundo trimestre de 2011 para acumular un 1,6% en el último año (desde el 2,4% a final de marzo). Por mucho que hayan mejorado los intercambios interregionales, sin mercados de exportación la capacidad de tirar del carro de los emergentes se reduce notablemente, China incluida. No es de extrañar que algunos hablen ya abiertamente de una inevitable recaída en la recesión o que haya muchos estrategas que defiendan que, a partir de este punto, lo esencial es evitar que se repita el caso japonés. … los bancos centrales amenazan retirada… Los bancos centrales parecen muy cerca de haber tirado la toalla, precisamente cuando se vuelve a apelar a ellos de manera desesperada. De hecho quizá ese sea el punto más relevante de lo comentado el pasado viernes por Ben Bernanke en el encuentro de banqueros de Jackson Hole. Algo explicitado más claramente por Thomas Hoenig, presidente de la Reserva Federal de Kansas, en un discurso pronunciado ante la Cámara de Representantes el pasado 26 de julio. Al final la expansión de su balance, por mucho que se nos quiera hacer creer lo contrario, no es ilimitada y la falta de circulación del dinero y el exceso de capacidad instalada han convertido en ineficaces sus acciones. Al pobre Trichet no le dejan enterarse, algo que sí ha hecho un Bundesbank que ha manifestado abiertamente su oposición a determinadas acciones del BCE como la compra de bonos en mercado. Las medidas no convencionales, ni han ayudado a crear empleo, ni el mercado de la vivienda ha mejorado por citar solo dos ejemplos. Su munición se agota y es hora de dar el relevo. Ocurre además que los intereses de los tres principales bloques del mundo desarrollado son coincidentes, dada la precariedad de sus economías, su necesidad de vender al extranjero y su debilidad financiera, por lo que el uso indirecto del exceso de dinero fiduciario como vía de devaluación encuentra cada vez más oposición tanto de acreedores, caso de China, como de los principales socios comerciales. … los gobernantes a la gresca… Y, por último, los políticos a la gresca, da igual el lado del Atlántico en el que uno se sitúe. Si patética fue la disputa de julio sobre el techo de endeudamiento en Estados Unidos, que en última instancia puso al país en el foco y creó el clima para lo que habría de venir después, peor ha sido el espectáculo europeo donde Merkel y Sarkozy, <em style="mso-bidi-font-style:<br><br><br>normal»>tras decidir ir por libre en el proceso de concentración fiscal comunitaria con el exclusivo seguimiento constitucional de España, han visto como su autoridad se veía dinamitada por la incapacidad de poner en marcha el acuerdo de rescate griego debido a condiciones impuestas… ¡por la propia Grecia!, toma ya, o por algún estado miembro como Finlandia. La oposición interna crece y hasta la puesta en marcha del propio fondo comunitario está en riesgo por la falta de apoyos parlamentarios internos de la canciller alemana para su aprobación. El resultado ha sido una caída de la confianza de ciudadanos y empresas brutal con el consecuente impacto sobre sus decisiones de consumo e inversión. Se cierra el círculo vicioso. En Japón, como bien saben, acaba de tomar posesión de su cargo como primer ministro el hasta ahora responsable de economía. Ese es el entorno para la toma de decisiones que determinará el futuro de sus gobernados durante mucho tiempo. Como para salir corriendo. … el dinero se esconde Fruto financiero de este caos generalizado, que aleja cualquier acción constructiva y abre la vía perentoria del recorte del gasto, ha sido la búsqueda de activos refugio como el franco suizo y el yen, el oro, o los propios bonos del tesoro norteamericanos cuyo diez años llegó en un momento a cotizar por debajo del 2% anual, exacerbando su rentabilidad real negativa. La volatilidad ha provocado, de hecho, que los inversores renuncien a la locura de los plazos cortos de la curva de tipos, el dos años griego ha llegado a rentar cerca del 50%, para centrarse en vencimientos más remotos en el tiempo. Si las bolsas fueron las primeras damnificadas -al afectarles las peores perspectivas tanto a su generación de flujos como a su prima de riesgo y, por ende, a su valor presente-, hacia final de mes la tensión se trasladó al mercado crédito, que es el que verdaderamente importa y que sí actúa como indicador adelantado. Su mayor caída desde noviembre de 2008, encendió las señales de alarma al tener impacto directo en el coste de financiación empresarial. Éramos pocos… EL CONFIDENCIAL. 30-8-2011 Monopolios. Cinco Días El mensaje de Sacyr a la banca J. F. Magariño Sacyr Vallehermoso es de las constructoras que invirtió con decisión en energía en 2006, como Acciona lo hizo en Endesa o ACS entró en Fenosa. La diferencia es que la firma que preside Luis del Rivero mantiene la apuesta por el petróleo, mientras que sus competidores han hecho evolucionar sus estrategias: Entrecanales se quedó con las renovables de la eléctrica y Florentino Pérez decidió abandonar Fenosa para engordar en Iberdrola. Esta vía tomada por Sacyr ha hecho que mantenga una importante deuda con la banca. En concreto, 4.908 millones que le han unido es una especie de relación de amor y odio con una veintena de entidades financieras. Se trata del saldo vivo de un crédito por 5.175 millones firmado en 2006 para la toma del 20% del capital de la petrolera, y que la firma que preside Luis del Rivero está tratando de renovar. Fuentes del sector financiero comentan que el grupo constructor debía hacer un gesto de poder en Repsol para generar confianza en los acreedores. El préstamo se paga con los dividendos de la participada y si Sacyr no tiene algo más que voz y voto en la política de remuneración, la banca desconfía sobre que Sacyr sea capaz de atender el servicio de la deuda. Dicho y hecho, Luis del Rivero y los suyos han dado con los nudillos en la propia mesa de Antonio Brufau. Al sindicar sus acciones con Pemex, hasta alcanzar el 29,8% del capital, demandan un giro estratégico que incluya mensajes claros al mercado -mayor eficiencia y búsqueda de sinergias entre las filiales, regularidad en el pago de dividendos, desinversiones puntuales, etcétera- para conquistar la deseada revalorización en Bolsa. Hoy la acción de Repsol vale 18,89 euros, por los 26,7 euros que pagó Sacyr a finales de 2006. El grupo de construcción siempre ha defendido que quería mantener su posición en la "mejor empresa española con permiso de Telefónica", según palabras de Del Rivero. Y trataba de apaciguar los ánimos entre la banca recordando que su empresa ha respondido al pago de los intereses y ha amortizado capital con lo que iba sobrando del dividendo pagado por la propia Repsol. El presidente de Sacyr no querrá más sorpresas respecto a la política de remuneración de Repsol. Tuvo suficiente cuando en febrero de 2010 Brufau sacó adelante un recorte del 19% y se puso en entredicho la capacidad de la constructora para afrontar los intereses que cobra el consorcio que lideran Santander, Caja Madrid, Calyon y Citi. También habrá sido insoportable para él la ruptura de los equilibrios de poder en su propia compañía. Dos partícipes de Sacyr, del peso de Juan Abelló y Demetrio Carceller, terminaron por revelarse en la última junta de accionistas ante el reforzamiento de Rivero y su consejero delegado, Manuel Manrique, en el consejo. Una batalla que vino precedida de la escalada del citado Carceller en Sacyr, hasta convertirse en primer partícipe, y las reiteradas quejas de este y de Juan Abelló sobre el escaso protagonismo que Sacyr tenía en las grandes decisiones de la petrolera. CINCO DÍAS. 30-8-2011