Una hora antes del inicio oficial de la concentración, ya estaba la plaza Urquinaona y los alrededores llenos de gente. Lo que sucede es que cada vez más colectivos se suman a las concentraciones. Funcionarios (en general), policía, bomberos… colectivos que antes no habían secundado las manifestaciones se empiezan a dar cuenta de que el problema es de todos, del 99% de la población, y que estamos todos en el mismo barco.
Ya quedan menos por llegar, y sin duda llegarán, hasta que ese 99% de la gente esté representado en sus amplias colectividades. Todo esto sumado a la gente que sigue saliendo cada vez que se le convoca a luchar contra estos recortes y contra este saqueo impuesto por Washington y Berlín. Esto hace que la fiesta no decaiga. Cada vez somos más, como demuestra el hecho de que hoy jueves, día laborable y muy caluroso, se hayan dado cita alrededor de 400.000 compañeros y compañeras marinos y navegantes de este barco en el que los capitanes reciben órdenes directamente de los piratas del barco enemigo, que vienen a por el oro que tenemos en las bodegas. «Podemos tomar el barco en el que navegamos el 99% para conseguir navegar a buen puerto.»Porque es verdad, nos lo quieren quitar todo, han bombardeado un barco en el cual ya teníamos algunos agujeros, nos han hecho un boquete enorme, y ahora nos dicen que para salvarnos, tenemos que aligerar el peso que tenemos en la bodega, tirar nuestro oro al mar para mantenernos a flote, y para mientras tanto, ellos poderse apoderar de él. Por el camino caen y caerán multitud de marinos, con enfermedades como el escorbuto y la avitaminosis, dado que a parte del oro nos están quitando nuestro alimento y nuestra salud. Al capitán le ordenan que vaya haciendo más agujeros para poder tirar más oro, con la promesa de que ellos después nos los taponarán y mientras tanto nos envían camino del acantilado del fin del mundo. Pero ya falta poco, ya falta poco para que todos estos marinos que luchan contra este ataque se de cuenta de 2 cosas: que los problemas son de todos, de los de babor y de los de estribor, de los de popa y de los de proa, de los de cubierta y de los de galeras (todavía hay marineros de estribor que piensan que serrando el barco y separándose del resto, no se verán arrastrados al fondo con el conjunto del navío, pero un barco partido por la mitad, tiene poca flotabilidad, en cualquiera de sus lados). Cuando se den cuenta de eso y de que los capitanes que tenemos y hemos tenido están controlados por los piratas enemigos, y que si nos organizamos podemos amotinarnos, tirar al capitán por la borda, torpedear al barco enemigo, tapar nosotros mismo los agujeros y ser nosotros los que gobernemos de una vez este barco, en ese momento, podrán cambiar las cosas en favor de la tripulación.Mientras tanto, la gente se va uniendo. Cada vez se escuchan más consignas referidas a que esto No Es Una Crisis, Es Intervención, y que No Es Rescate, Es Un Saqueo, aunque hace falta que sea un canto mayoritario para que la mente de los marinos haga ese ‘click’ que necesita para cambiar esta situación. De momento, es un placer bajar tranquila y pacíficamente por Vía Laietana reivindicando y paseando al mismo tiempo, escuchando batucada, cantando “En El Pozo Maria Luisa”, también conocida como “Santa Bárbara Bendita”, en 2 ocasiones, en mitad del recorrido y al final del mismo en Pla de Palau, recordando que los mineros nos han dado un ejemplo de lucha recientemente. De lucha, de solidaridad obrera y de consecuencia en los actos.En conclusión hoy se ha visto, por lo menos en Barcelona, que el frente ya lo tenemos, o en su caso, falta poco para que se sume una gran mayoría. Sólo tenemos que darnos cuenta de ello, discutir, organizarnos, y podremos tomar el barco en el que navegamos el 99% para conseguir navegar a buen puerto.