Cargando...Ferrari se desespera. La escudería Brawn GP ha vuelto a barrer en la competición. En Mónaco hemos podido ver la escenificación de la distancia abismal que cada vez más se abre entre el equipo de Button y el resto. Son ya 51 puntos y Barrichello, compañero de escudería, el segundo en la tabla. Nuestro piloto asturiano sigue en la batalla, aunque acabando en puesto que no se merezca, visto de conjunto. Tanta diferencia entre equipos no ha de ser para siempre – por razones que ya hemos analizado en esta sección -, pero de momento se ahonda.
Ferrari luchó contra su ropio difusor y Massa se ahogó en el KERS, que se muestra incapaz de plantar cara; totalmente insuficiente.Cuatro abandonos – Vettel (vuelta 17), Piquet (10), Buemi (10) y Kubica (30) – , y Brawn paseándose sin demasiado esfuerzo y ayudado por una acertada estrategia del equipo con el tipo de neumáticos.Kovalainen con su KERS, Webber y Rosberg con sus difusores, Fernando Alonso… nada de nada, y Lewis Hamilton ni estuvo. El retraso por el cambio de la caja de cambios fue decisivo, lo que no quita la humillación de ser doblado por su compatriota, Jenson Button. Revalidar el título del año pasado empieza a convertirse en algo casi imposible. Aunque todo está por decidirse, o casi todo; a veinte vueltas del final de la carrera, en Mónaco estaba todo decidido. No es baladí insistir: la distancia es sideral y apabullante.El problema, como no podía ser de otra manera, recae en el espectáculo y en el público. Por las características de la Fórmula Uno, las diferencias tan enormemente acusadas van en detrimento de la emoción de la competición. No estamos hablando de un Nadal arrasando con la potencia de su arranque inesperado, o su resistencia desesperante… la ausencia de un despliegue de audacia y habilidad que ponga en vilo a los aficionados, convierte la carrera en un aburrido paseo a 250 kilómetros por hora.Los pilotos siguen desaparecidos. Sin un difusor que recorte alguna décima por vuelta, Alonso está perdido, incluso habiendo solucionado el problema del peso añadido del KERS. Al finalizar la carrera, Alonso se mostraba, no obstante, muy satisfecho con el rendimiento de su equipo: "Hemos hecho todo lo que estaba en nuestra mano y al final hemos conseguido arañar dos puntos, todavía estamos lejos de los mejores, pero esperemos que funcionen las mejoras que tendremos en Turquía".Pese a todo Ferrari estuvo presente en el podio, lo que, por lo menos, añade algo de emoción a la contienda.Pero la disputa técnica sigue siendo protagonista. De ahí la relativa desesperación del equipo de Red Bull, que no obtuvo los resultados deseados con el nuevo doble difusor.